Zaragoza Buenas Noticias

Ester Ibarz: «Hasta los belgas prefieren la gastronomía española»

Ester Ibazt.
Ester Ibarz.

Nerea Beatove./ De raíces binefarenses y adopción zaragozana, Ester Ibarz, de 22 años, se trasladó hasta la capital aragonesa para continuar con su pasión por la gastronomía, donde ha conseguido destacar en una de sus especialidades, el arte del cóctel. Después de trabajar entre platos y copas en nuestra ciudad, y haberse hecho con algunos reconocimientos como el Premio a la Profesionalidad y Elegancia en el Concurso Nacional de Maitres y Barmans profesionales de Aragón, decidió comenzar una nueva aventura en Bélgica, donde trabaja desde hace siete meses.

Entrevistamos a esta joven viajera asentada en Bruselas, con mucha iniciativa, energía y ganas de aprender, que nos cuenta algunas de las curiosidades de la gastronomía belga, y sus experiencias en el país de la cerveza y el chocolate. 

-¿Qué fue lo que te empujó a tomar la decisión de viajar al extranjero?
-Uno de mis sueños siempre ha sido viajar a diferentes lugares, pero por unas circunstancias o por otras nunca pude. La excusa para irme fue la finalización de mis estudios, comencé a trabajar, pero a los pocos meses me despidieron. Tenía intención de irme a Madrid o Barcelona pero una amiga me comentó que iba a ir a Bruselas a estudiar un máster de psicología, entonces ella fue la que me engañó gratamente a venir hasta aquí y comenzar juntas una nueva aventura.

-¿Habías valorado antes la opción de trasladarte a otros países?
-La verdad es que no, me ha gustado siempre las grandes ciudades, y siempre he querido vivir en sitios como Madrid o Barcelona, pero nunca me había planteado comenzar mi vida en otro país.

– ¿Dónde estás trabajando actualmente en Bruselas?
-Desde octubre del año pasado estoy trabajando como barman en un bar de tapas a lo mas estilo barcelonés, su nombre es Munchy’s Tapas & Drinks, la plantilla es joven y la verdad que estamos muy motivados.

-Eres Técnico Superior en Servicios de Restauración, ¿siempre quisiste dedicarte al mundo de la hostelería?

-La verdad es que nunca antes me he había planteado estudiar cocina. Al terminar bachillerato me interesaba el lenguaje de signos, pero no pude entrar, entonces me estuve informando sobre todos los ciclos superiores y este me pareció muy interesante porque siempre me ha gustado la gastronomia y aprender cocinar. Al terminarlo me di cuenta que quería estar cara al cliente y por eso realicé otro Ciclo Superior de Servicios, donde mejoré sobre coctelería, vinos, cafés y platos elaborados. Quizá esta afición por la cocina venga de mi madre, ya que es muy habitual en ella invitar a todo el mundo a casa a picar algo o comer, y preparar cada domingo comida para toda la familia. Recuerdo desde muy pequeña ayudarla en lo que pudiera y ahora me doy cuenta de que soy igual en ese sentido, de ser servicial y abierta para invitar a todo el mundo.

Fresas con chocolate belga.
Fresas con chocolate belga.

-Imagino que será un lujo poder descubrir las características de la gastronomía belga, ¿qué productos destacarías y con cuál de ellos te has sorprendido?

-La gastronomía belga es muy curiosa, se parece a la francesa, con sus sopas, verduras de temporada y carnes de caza. Sus platos típicos me llaman mucho la atención como los mejillones hervidos con patatas fritas (moules-frites). Que algo tan simple sea lo más famoso y lo mas comido por los turistas, me sorprendió muchísimo. Te sirven kilo y medio de mejillones hervidos a la cerveza en la propia olla donde los hierven y aparte una ración de patatas fritas.

-¿Qué plato típico o no tan típico de la zona recomendarías a los lectores?

-A mí lo que más me gusta son “Les potages” o sopas calientes, con verduras y carne acompañada de una crema, va genial para los días de lluvia.

-La cerveza y el chocolate son sin duda dos de los productos estrella, ¿se merecen esta fama?

-Por supuesto que sí. Todo el mundo puede decir que el chocolate suizo es mejor, o que la cerveza de su región es la mejor, pero después de probar tantas cervezas de distintos tipos, que las hay de infinitas variedades, sabores, y elaboraciónes (trapistas, abadías, lambics) y sus altas graduaciones, (hasta mas de 12ºvol) creo sinceramente que si te gusta la cerveza, este es tu lugar. Y los bombones de las chocolaterías al estar hechos a mano, fabricados artesanalmente y ser 100% chocolate belga, están realmente buenos.

Ester con una de sus elaboraciones.
Ester con una de sus elaboraciones.

-Además, eres especialista en cócteles, ¿es habitual encontrar este tipo de bebidas en los pubs? ¿Existe esa cultura de tomar una copa después de cenar?

-En casi todos los bares o pubs si que tienen carta de cocteles, pero suelen ser los más clásicos. Por Bruselas he visto pocas o casi ninguna cocteleria, o bar especializado en cocteles. Donde trabajo ahora estamos mejorando nuestra carta de cócteles, además de encontrar los clásicos queremos innovar y hacer nuevos. Después de cenar aquí no es muy habitual lo de tomarse una copa, se suele continuar con lo que estas bebiendo, o tomar una cerveza en su defecto.

-¿Cuál es tu elaboración coctelera por excelencia?

El cóctel que me gusta hacer y el que más preparo para fiestas con amigos es el mojito en todas sus variedades. Es el cóctel por excelencia, el mas clásico pero en muy pocos sitios los hacen bien, y no es por fardar pero mis mojitos de fresa me quedan estupendos.

-¿Es fácil encontrar productos españoles allí?

-Con toda la inmigración que ha habido es bastante fácil encontrar productos españoles, hay tanto tiendas especializadas, restaurantes, mercados en los que hay puestos tanto de comida como de bebidas. Al venir aquí pensaba que iba a echar de menos las “cosicas de casa” pero todo lo contrario, puedo encontrar casi todo.

-¿Con cuál te quedas, con la gastronomía española o la belga?
-Sin pensarlo ni un segundo, prefiero la española. Con todos los productos que tenemos, y como los elaboramos, ningún otro país nos supera. He hablado hasta con personas nacidas aquí (en Bruselas), que han estado en España y prefieren nuestra gastronomía.

Ester con algunos de sus compañeros del restaurante donde trabaja.
Ester con algunos de sus compañeros del restaurante donde trabaja.

-¿Cómo es trabajar en otro idioma?
-Es que no es solamente en el trabajo, es el día a día y más aquí en Bruselas que se habla tanto el francés, el inglés y el neerlandés. Al principio resulta muy complicado hablar y comprender todo lo que te dicen, te resulta muy frustrante no poder explicarte lo bien que quisieras, pero vas cogiendo poco a poco soltura y dejas la vergüenza atrás.

– ¿Conocías la lengua antes de viajar?
-Antes de venir aquí tenía una base tanto de inglés como de francés, pensaba que con eso era suficiente pero me di cuenta al llegar aquí que tenía que mejorar y no poco. Ya aquí conociendo gente de la ciudad y de otros países vas aprendiendo, y a parte de estos dos idiomas ahora con mi amiga estamos empezando a aprender neerlandés, pero me resulta muy complicado.

-¿Cómo valoras tu experiencia allí?
-Es una de esas cosas que sabes que no te vas a arrepentir en la vida, por ahora todo lo que he vivido aquí no lo he hecho en ninguna otra parte, creo que hemos sido muy valientes en dejarlo todo y venir con una mano delante y otra detrás sin tener nada y ver que todo va cogiendo forma. Una de las mejores experiencias que he vivido. Recomiendo a todo el mundo que tenga valor y que no tenga miedo a perdérlo todo.

Ester en la Plaza de la Justicia, Bruselas.
Ester en la Plaza de la Justicia, Bruselas.

– ¿Tienes pensado volver?
-De momento hace poco que estoy aquí y con la comunicación que hay, que solamente en dos horas en avión me puedo plantar en España, pues no tengo pensado volver. En este momento tengo contrato indefinido, tengo buenísimas amistades, estoy muy agusto y muy motivada en seguir viajando y aprendiendo cosas nuevas, con mis 23 años que cumpliré creo que tengo mucho tiempo por delante para volver.

-¿Qué te gustaría hacer en un futuro profesionalmente?
-La verdad que nunca pienso en el futuro, suena muy típico lo de “vivir el momento” o el “carpe diem” pero es así, si estás bien ahora, por qué pensar en algo que no conoces? Si tengo que pensar en algo sobre mi futuro profesional, ¿por qué no trabajar en un buen hotel como maître?, estaría genial, la verdad.

-Y por último, ¿cuál es tu buena noticia?
-Una buena noticia para mí, sentimentalmente, sería juntarme con mi familia entera, con mis padres que hace seis meses que nos los veo, y también con mi hermana mayor, que por motivos laborales está en Colombia y hace tres años que no la veo. Con que la mejor noticia para mí sería un bonito reencuentro.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *