Redacción. / Ponerse en la piel de un artesano, saborear un delicioso vino, conocer la figura de Goya y caminar entre ruinas de un pueblo destruido por la Guerra Civil son solo algunas de las posibilidades de esta ruta. Descubrir la provincia de Zaragoza es una actividad apta para todas las edades y bolsillos.
Nuestra propuesta comienza en la localidad de Muel, situada a tan solo 27 kilómetros de Zaragoza. En su escuela-taller los visitantes pueden conocer de primera mano el trabajo de los artesanos que elaboran la cerámica que da fama a la localidad, característica por sus tonos azules y blancos. Aquí Goya también dejó su huella, concretamente en el interior de la ermita de la Virgen de la Fuente, construida sobre una antigua presa romana.
Nuestra ruta continúa en Cariñena, a 20 kilómetros de Muel. Se trata de una visita obligada para los apasionados del mundo del vino. Aquí tiene su sede la denominación de origen más antigua de Aragón, que ha sabido adaptarse a las nuevas demandas de los consumidores. El Museo del Vino y las múltiples bodegas conforman el principal atractivo turístico de la zona.
A unos 26 kilómetros de distancia encontramos Fuendetodos, población que vio nacer al genial pintor Francisco de Goya. Aquí podrás conocer su Casa Natal y el Museo del Grabado, donde se exponen las cuatro series más importantes del artista aragonés.
Muy cerca, en Azuara, podrás visitar los restos de la villa rústica romana de La Malena. Para visitarlos es necesario contactar con el Ayuntamiento de la localidad.
Finalizamos esta ruta en Belchite, una localidad que esconde un pueblo viejo, destruido durante la Guerra Civil. Los visitantes se sobrecogen al caminar entre sus ruinas silenciosas que, a la vez, incitan a reflexionar sobre el dolor que se vivió en Belchite no hace tantos años. El acceso sólo es posible con las visitas guiadas que organiza la oficina de turismo de Belchite, en el pueblo nuevo, al otro lado de la carretera. El entorno de la localidad es más que recomendable, donde encontraremos los hermosos parajes naturales de Las Estepas, como el refugio de fauna silvestre La Lomaza y la reserva ornitológica del Planerón.