Ana Roche. / Los músicos Kike Lera, Fran Gazol, Teresa Polyvka y Joaquín
Murillo son los encargados de ofrecer al público el espectáculo teatro-musical “El Funeral”. Oua Umplute. Creando una pieza original, sensacional, divertida y llena de sorpresas.
Cuatro personajes, los nietos del abuelo Dimitri, muerto hace mucho tiempo, se reúnen para celebrar el funeral. Durante todo este tiempo los cuatro nietos han estado de gira por todo el mundo, entonando aquellas canciones que el difunto abuelo Dimitri les cantaba cuando eran pequeños.
Lo que en principio nos parece algo muy triste, mientras avanza la obra, el funeral se parece más a una fiesta. Músicas zíngaras entonadas con diferentes instrumentos que hacen parecer situaciones increíbles. Un funeral diferente que se convertirá en una fiesta.
Este espectáculo solo puede ser fruto de una compañía como Producciones Che y Moche que se consolida como estructura artística en 1997 y a la que se reconoce a nivel nacional e internacional. Su faceta multidisciplinar, fusionando la música y el teatro y su trabajo en constante evolución nos dan piezas con gran calidad, rigor y para todo tipo de público como el montaje de “El Funeral”. Durante una hora y media las interpretaciones de los músicos/actores hicieron reír al público maño y consiguieron crear una complicidad, haciendo sentir al espectador parte de “El Funeral”
Es importante saber de donde se viene desde lo musical dice la compañía Che y Moche: “Muchos han venido de la antigua Yugoslavia, Moldavia, Hungría, Rumania, Ucrania, Rusia etc., lugares donde crecieron rodeados por un fenómeno musical ‘explosivo’ , en la mayoría de los casos una especie de ritmo rápido de cosecha propia; música virtuosa y popular de raíz folclórica, interpretada por eslavos y gitanos una mezcla de las tradiciones musicales que ha existido durante siglos en el este de Europa, se tocó en las bodas, funerales, circuncisiones, bautizos, suena en las calles, en las tabernas y en la salas de conciertos; una expresión del alma y una música que se reproduce desde el alma de artistas que después de cientos de años de transmigraciones han mezclado estilos musicales de Oriente y Occidente dando forma a los sonidos de una nueva Europa, sonidos creados en el exilio con un oído dirigido a la patria y el otro en el nuevo país”.
Un espectáculo para todos donde la risa está más que asegurada.