Elena Aznar. / Este arte, antes delimitado por el rango social de cada persona, ha pasado a convertirse en una verdadera industria donde el Made in Italy tiene un peso muy importante. Firmas icónicas como Gucci, Armani o Valentino han hecho del lujo italiano un modo de vida. Pero también existen una inifinidad de marcas, sastrerías y pequeños talleres repartidos por toda la geografía italiana donde se siguen creando prendas y accesorios a mano con mimo y delicadeza.
Una de ellas Pomàndere, creada por el joven diseñador Carlo Zanuso y que apuesta por materiales de calidad. La pureza de sus diseños y la atención personalizada son sus señas de identidad. Sus colecciones, contemporáneas y románticas definen el estilo de una mujer actual que elige su look de forma natural. Eleonora Amadei, que nació en 1990 como una marca inspirada y realizada cien por cien en Italia, comienza a abrirse camino en los mercados extranjeros. Inspirada en una mujer elegante y glamurosa que comparte el gusto por lo refinado y lo chic, ha sabido imponerse en el mercado italiano adquiriendo cada vez más importancia gracias a su gran propuesta de artículos y diseños.
Con la creencia y la convicción de ofrecer a sus clientes solo productos italianos en 2006 nace Melacerba, un estilo femenino y armonioso que presta especial atención a los tejidos y a la vitalidad de los colores. La marca, apta para mujeres dinámicas y decididas, glamurosas y optimistas está a mitad de camino entre lujo y el low cost.
Por último, en la costa amalfitana, uno de los destinos turísticos más importantes de Italia, nace Antica Sartoria Positano como consecuencia del fenómeno hippy que durante los años 60 se adueñó de la ciudad. Su gran variedad de colores visten una mujer que ama viajar en el tiempo. Sus básicos, el kaftán, los accesorios de conchas marinas y una inmensa paleta de colores. Inspirada en el arte, de los antiguos mosaicos romanos y de las cúpulas de las iglesias, y en las leyendas de antiguos tesoros escondidos, nace el estilo de una mujer llena de color y de vitalidad.