Redacción:/ Zaragoza en verano, lo más fácil es que haya días que el mercurio alcance los 40 grados en las horas centrales del día. Si no quieres estar encerrado en casa , te proponemos una ruta para que no te derritas y disfrutes viendo Zaragoza. Vamos a recorrer Zaragoza por la sombra.
Partiendo desde la Plaza del Pilar junto a la Oficina de Turismo, nos dirigiremos hacia el centro de la ciudad por la C/ Francisco Bayeu. En el cruce de ésta con la C/ Espoz y Mina podemos hacer una parada y ver la iglesia de Santa Cruz (del siglo XVIII) y el Museo Camón Aznar (para ver grabados y obras de Goya).
Continuaremos por la C/ Santa Cruz y atravesamos la Plaza Santa Cruz (un lugar tranquilo con veladores en los que poder tomar algo). Aquí podemos encontrarnos con edificios renacentistas como el palacio del Prior Ortal.
Llegamos a la confluencia de las calles Ossau y Méndez Núñez. Aquí se mezclan los comercios de toda la vida con otros nuevos. Cuchillerías, queserías, reposterías, tiendas de complementos de novia, jugueterías, tiendas de ropa vintage… son algunas de las tiendas que podemos encontrar en esta zona. Aquí se encuentra también la iglesia de San Gil (que data del siglo XIV y destaca su torre mudéjar).
Por Ossau nos adentramos en la zona del Tubo en la que no faltan bares en los que degustar deliciosas tapas. Saldremos por las calles 4 de agosto y Tubo a la Plaza de España, pleno centro de la ciudad.
Continuamos por el Paseo de la Independencia. Aquí y en las calles aledañas encontraremos una de las zonas comerciales de la ciudad. Hay numerosas tiendas de moda, restaurantes, locales de ocio… Por el Paseo podemos ver edificios neoclásicos, como el de Capitanía, haciendo contraste con otros del siglo XX. Otros lugares que no podemos pasar por alto son la iglesia de Santa Engracia, el edificio de Correos y el monumento al Justiziazgo en la Plaza de Aragón.
Continuaremos caminando por los reformados paseos de Gran Vía y Fernando el Católico, (o en tranvía para los que no sean muy andarines), hasta el Parque José Antonio Labordeta, conocido por los zaragozanos como el “Parque Grande“. Desde la entrada principal del parque, en el puente 13 de septiembre, podemos ver la torre-faro de la Cámara de comercio.
En el parque podemos visitar el jardín botánico, la escultura de Alfonso I el Batallador, el quiosco de la música, recorrer sus jardines y paseos (a pie, en bici de alquiler o con el tren del parque), o hacer una pausa para tomar algo en alguna de las múltiples terrazas que hay con unas relajantes vistas.
Una ruta diferente para no dejar de descubrir Zaragoza por mucho que caliente el sol.