Redacción:/ Una obra de arte, creada con la misma entrega con la que los viticultores transforman en grandes vinos las uvas de los terrenos pedregosos de la Denominación de Origen Protegida (D.O.P.) Cariñena. Una piedra preciosa tallada a partir de la ubicación geográfica de los 14 municipios que integran la Denominación. Y un sinfín de sensaciones, como las que emana El Vino de las Piedras, es lo que pretende transmitir la nueva imagen y campaña que han presentado hoy el presidente Antonio Ubide y el responsable de Comunicación y Márketing, José Luis Campos.
Cariñena ha convertido «El Vino de las Piedras» en el lema e imagen con el que se la conoce e identifica inmediatamente. Un rediseño completo del logotipo inicial (la famosa piedra sobre la base de una copa de vino) y una nueva campaña de promoción que se pone en marcha hoy mismo.
En ella se hace un paralelismo entre la creación artística y el proceso de elaboración de los Vinos de las Piedras. Así, un escultor trabaja la piedra y el resultado final es una botella de la D.O.P. Cariñena. «Te dirán que son caprichosas, que trabajar con ellas es duro y meticuloso, que cualquier contratiempo puede echarlo todo a perder. Es verdad. Lo que nadie te contará es que si crees en lo que haces, si lo quieres de verdad, podrás crear sensaciones inolvidables. Nosotros lo hemos hecho, hemos conseguido sacar los mejores sabores de las piedras».
«El Vino de las Piedras» arrancó en 2011 con este planteamiento: «Año tras año, algunos de los mejores cocineros del mundo se siguen haciendo la misma pregunta, ¿cómo es posible elaborar algunos de los mejores vinos del mundo en un lugar donde solo hay piedras?» Cariñena apostó así por destacar en su lema una de sus características más singulares: el terreno pedregoso existente en buena parte de la Denominación, con el que se logra un mayor equilibrio de humedad y temperatura para que las uvas se desarrollen perfectamente.
Además, se ha llevado a cabo un rediseño total del primer logotipo, que ha dado paso a una piedra preciosa formada a partir de la localización geográfica de los 14 municipios de la Denominación (Aguarón, Aladrén, Alfamén, Almonacid de la Sierra, Alpartir, Cariñena, Cosuenda, Encinacorba, Longares, Mezalocha, Muel, Paniza, Tosos y Villanueva de Huerva), que marcan sus aristas.