Redacción:/ La consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales, María Victoria Broto, ha acudido a las instalaciones del Centro de Observación, Acogida e Internamiento (COA) del Gobierno de Aragón para conocer el día a día de esta residencia y para hablar con sus trabajadores.
Broto ha explicado a los educadores el proceso por el que una nueva empresa se hará cargo de este centro y ha insistido en la imposibilidad de revocar el contrato de adjudicación de la gestión de estas instalaciones.
No obstante, ha garantizado a los trabajadores “la plena atención” a los menores allí acogidos y ha señalado que “se vigilará el estricto cumplimiento” de los términos del contrato por parte de la empresa adjudicataria.
La función del COA es la acogida, observación y apoyo a aquellos menores de 6 a 18 años en grave riesgo de desamparo y cuya situación personal, social o familiar requieren una intervención urgente e inmediata. La media de menores que permanecen en estas instalaciones es de una veintena y se calcula que pueden pasar por las mismas unos 300 al año.