Redacción./ Cecilia Giménez advirtió que el Ecce homo pintado en la iglesia de la localidad zaragozana de Borja se estaba deteriorando por las humedades y los salitres, y decidió intervenir. Primero trabajó sobre la túnica. Y, en un momento dado, se lanzó directamente a arreglar el rostro. La obra original la realizó Elías García Martínez en el siglo XIX y lleva esta dedicatoria: “Este es el resultado de dos horas de trabajo a la Virgen de la Misericordia”.
Hace un año que Andrew Flack visitó la localidad aragonesa desde el corazón de EE UU para conocer en primera persona la historia de Cecilia Giménez, la octogenaria que intentó restaurar un fresco de Cristo que había quedado en el olvido en el Santuario de la Misericordia y que estaba muy deteriorado por la humedad. La chapuza de esta vecina bienintencionada dio la vuelta al mundo en el verano de 2012.
Cecilia, como si se hubiera tratado de una pintura colgada en la pared de su casa, entró en la iglesia y sin pedir permiso decidió volver a dar vida a la obra original que salió de la brocha de Elías García Martínez a comienzos del pasado siglo. «Es una historia fascinante, llena de misterio, de fe profunda», comenta el autor de la ópera. Es un proyecto que lidera junto al compositor Paul Fowler y en el que Amanda Berg Wilson hace de directora.
La directora de la obra explica que el objetivo de la ópera es jugar a la vez con el humor, «por lo horrible que parece la restauración», y la devoción que movió a Cecilia. El primer acto, comenta Amanda Berg Wilson, pretende mostrar la cara más tradicional de Borja. En el segundo, el objetivo es mostrar cómo la modernidad «invade» a un pueblo que estaba literalmente estancado en el tiempo y de golpe revive ese verano.
Desde Borja, Cecilia, es conocedora de la existencia de esta ópera, «La he recibido como tantas cosas que me mandan de todo el mundo. De Alemania, de todos los sitios», afirma esta mujer, que recuerda que «al principio» lo pasó «muy mal», pero que se ha ido «acostumbrando»
Un plan de marketing
Tres años después de la fallida restauración, que se dio a conocer fuera de las fronteras de España, el Ayuntamiento pondrá en marcha un plan de marketing y venta de productos relacionados con el Eccehomo, como camisetas, polos y tazas, con los que se pretende seguir atrayendo visitantes a la ciudad
Fotos: Agencia EFE.