ZBN.- Entrevistamos a Marian Recaj González una joven emprendedora, licenciada en Historia del Arte y especializada en idiomas. Nos presenta su proyecto «FUN FAM«.
Sus propuestas son actividades lúdicas: A través del arte y la cultura para disfrutar en familia jugando y aprendiendo idiomas como sus talleres culturales girando alrededor de festividades, tradiciones, costumbres para conocer mejor como ven el mundo en otros lugares.
¿Cuándo comenzó tu proyecto?
–Fun Fam surgió en 2014, daba clases de inglés a niños y observé por un lado la preocupación de los padres porque sus hijos aprendieran el idioma y por otro, lo pronto que algunos niños desarrollaban sentimientos negativos hacia él. Esto me llevó a pensar que los padres podrían tomar un papel activo en el aprendizaje de idiomas de sus hijos, con actitudes positivas hacia los idiomas y su integración en los momentos de ocio en familia.
No fue hasta comienzos de 2015 que comencé a desarrollar el proyecto y a realizar las primeras actividades.
¿Qué es lo que te motivo a realizarlo?
-Mi primer proyecto como emprendedora no había funcionado por muchas causas diversas, la primera era que no sentía pasión por lo que hacía. No quería volver a trabajar por cuenta ajena, buscaba algo que me llenara y en lo que pudiera poner en práctica aquello que me gustaba y a lo que siempre me había querido dedicar, el arte y la cultura.
En esa búsqueda fui uniendo experiencias profesionales con lo que había estudiado y lo que siempre había querido hacer y de esa mezcla nació Fun Fam.
Mi motivación era y sigue siendo que me encanta lo que hago, que aprendo de cada paso que doy y voy mejorando conforme avanzo.
¿En qué ámbito laboral te mueves, respecto a empleados y clientes?
-Actualmente, trabajo sola en el proyecto aunque colaboro con otras personas, empresas y entidades.
Fun Fam no cuenta con una sede ni con un espacio fijo en el que desarrollar las actividades, he optado por buscar espacios en la ciudad y pensar actividades que allí se puedan desarrollar. De esta manera, acercamos diferentes públicos a espacios que quizás nunca habían visitado, o que tenían una percepción negativa de ellos y con nuestras actividades los ven de una manera diferente.
Por el momento, trabajamos con familias con niños entre los 3 y los 10 años pero ya estamos pensando en actividades para otros públicos.
¿Qué es y que haces en Fun Fam?
–Fun Fam nace de la convicción de que los idiomas son más que una asignatura y que su importancia va más allá de ser una herramienta para conseguir trabajo. Los idiomas nos hacen más abiertos, creativos y tolerantes porque nos acercan a otras culturas y nos ayudan a entender mejor a los otros y actualmente hace mucha falta en los tiempos que vivimos.
Con Fun Fam lo que pretendo es crear momentos en los que las familias se puedan acercar a los idiomas juntos, que los niños puedan vivirlos fuera de un contexto académico sin presiones, disfrutando y divirtiéndose.
Hacemos actividades culturales y creativas en museos y espacios creativos en las que nos centramos en algún tema como los colores o las partes del cuerpo o en aspectos culturales de diferentes países. Por el momento, trabajamos en inglés y sobre países anglosajones pero vamos a empezar a trabajar con otros idiomas y culturas.
¿Cuál es tu percepción de la actividad empresarial en Zaragoza?
-Zaragoza ha cambiado muchísimo en la última década en muchos aspectos, es una ciudad más abierta, orgullosa y creativa y eso también se nota empresarialmente. En mi opinión, en Zaragoza cada vez hay más proyectos y empresas que optan por maneras de trabajar y relacionarse más dinámicas que fomentan la circulación de ideas y la colaboración.
¿Cuáles fueron los efectos de la crisis en tus decisiones?
-La crisis en mi caso, no solo fue laboral si no también personal. Ha sido un periodo de cambio que me llevó a plantearme que era lo que realmente quería hacer, a tomar decisiones equivocadas, enfrentarme con mis propios miedos, fracasar y volver a empezar.
¿Qué rol consideras que deben tener los jóvenes en la sociedad empresarial de Zaragoza?
-Los jóvenes tienen que tener más representación a todos los niveles en la ciudad ya que sin ellos el proceso de cambio que estamos viviendo no seguirá. Sin embargo, creo que precisan de un mayor acompañamiento que les anime a buscar oportunidades diferentes a las establecidas.
¿La de empresario es una profesión de riesgo?
-Desde luego, hay que estar un poco loco para emprender en un país que no quiere nada a los autónomos y no se lo pone nada fácil. Además, no existe la seguridad y la estabilidad y requiere estar continuamente en movimiento y buscando un equilibrio.
¿Los mejores maestros en el mundo de la empresa son los errores?
-No hay duda de que de los errores se aprende pero no se consigue nada si no se es capaz de reconocerlos, detectarlos y corregirlos, para lo que es fundamental contar con una visión externa.
¿Cómo valoras el apoyo de los programas municipales de ayuda al emprendedor?
-Para mí han sido fundamentales, tanto para comenzar, ya que el proyecto con el que me lancé al emprendimiento fue seleccionado en el II Semillero de Ideas de Zaragoza Activa, como para continuar tras el fracaso de esa primera aventura.
Formar parte de la comunidad de la Colaboradora ha sido decisivo para que Fun Fam haya pasado de idea a proyecto y de que siga adelante a pesar de las dificultades, estas menos solo en el camino del emprendimiento y surgen grandes oportunidades de colaboración con otras personas y proyectos.
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