ZBN.- La gala arranca las 22.00 h, pero, como prueba de que los Goya no son solo una ceremonia de reconocimientos, el espectáculo comienza mucho antes: desde las 19.00 h., con la llegada de invitados a la alfombra roja. Dani Rovira repite como conductor.
Las aventuras internacionales de Isabel Coixet (Nadie quiere la noche, 9 candidaturas) y Fernando León de Aranoa (Un día perfecto, 8 nominaciones), y el debut de Daniel Guzmán (A cambio de nada) completan el quinteto de nominadas a mejor película. Las cinco cuentan con la participación de TVE.
Glamour internacional y local.
Con la presencia confirmada de las estrellas Juliette Binoche (Nadie quiere la noche) y Tim Robbins (Un día perfecto) crece la atención por la alfombra roja sobre la que desfilan nominados como Penélope Cruz (ma ma), Ricardo Darín (Truman), Luis Tosar (El desconocido), Javier Cámara (Truman), Inma Cuesta (La novia), Asier Etxeandia (La novia), Irene Escolar (Un otoño sin Berlín) o Pablo Alborán (Palmeras en la nieve).
Lista a la que hay que sumar invitados como Javier Bardem, Marisa Paredes, Iciar Bollain, Victoria Abril, Paz Vega, Goya Toledo, Carmen Machi, Óscar Jaenada, Javier Gutiérrez, Antonio de la Torre, Juan Diego Botto, Macarena Gómez, Bibiana Fernández o Alaska. Y, como ingrediente extra, el Nobel peruano Mario Vargas Llosa, que entregará el Goya al mejor guión original, y su pareja Isabel Preysler.
El duelo: Inma Cuesta o Natalia de Molina.
Si el Goya al mejor actor parece claro para la perfecta interpretación del argentino Ricardo Darín en Truman, el gran duelo de la noche se adivina en la categoría de mejor actriz entre Inma Cuesta (La novia) y Natalia de Molina (Techo y comida).
Para Cuesta, que se impuso en los premios Feroz, es la tercera nominación (La voz dormida, Tres bodas de más) y hay ganas de consagrar a una de las actrices más importantes del cine español en el último lustro. Pero Natalia de Molina (ganadora revelación por Vivir es fácil con los ojos cerrados) luce, y mucho, en su desgarrador papel de madre desahuciada.
Antonia Guzmán, con 93 años, puede obtener el Goya a mejor actriz revelación por A cambio de nada, la película de su nieto Daniel Guzmán.
Y el debut de Antonio Resines
Nombrado presidente de la institución el pasado mayo, Antonio Resines debuta como tal en la ceremonia. Uno de sus mayores orgullos es el primer Goya de Honor entregado en su mandato: el de Mariano Ozores, el único ganador que sabe que tendrá que dar un discurso.