Gemma Ruiz.- Entrevistamos a Christian que paralelamente al mundo de la televisión, estudia la vida de Leonardo da Vinci y ejerce de conferenciante para empresas basadas en la motivación y en la búsqueda de talento. Nos presenta la segunda novela de su trilogía Artistas del Renacimiento, Rezar por Miguel Ángel. Un libro de arte, misterio y religión en el Renacimiento italiano.
-El libro anterior fue fruto de cinco años de documentación, ¿cuántos años tardó en este?
Son nueve años en total, porque toda la documentación es para la trilogía. En el fondo son dos años por personaje, más tres que estuve documentándome sobre todo el Renacimiento.
-Y sin ser historiador, ¿de dónde viene este entusiasmo por el Renacimiento italiano?
La historia del Renacimiento es muy larga, para contarla otro día. Pero septiembre de 2009 es cuando vi por primera vez La Última Cena de Leonardo. La vi en una situación muy especial, con un grupo muy especial de niños de síndrome de Down. Me pasó una cosa muy bonita y me enganché a Leonardo y al Renacimiento, no por Leonardo y el Renacimiento, sino por una cosa que me pasó con una de las niñas. Fue tan bonito que dije ¿por qué aquí?
Se cerró el círculo de una manera tan bonita, que me empezó a apasionar una cosa a la cual no iba predispuesto a apasionarme
– Podemos decir que fue una señal…
No sé si fue una señal, pero sí una causalidad. Y luego, sí que es verdad, que me han pasado cosas muy chulas en ese sentido con causalidades. Por ejemplo, cuando terminé de hacer toda la promo de Leonardo y acabamos el documental en La Toscana y en Francia, el último plano que tomo es en la tumba de Leonardo, en el castillo de Amboise.
Al terminar, le dije al cámara: Pues ya he acabado con Leonardo, tengo que empezar con Miguel Ángel, vámonos a celebrarlo. Entonces, salimos por la puerta del castillo y me dice el cámara, que es muy amigo mío: Cris, ¿no te has dado cuenta? ¿tú te acuerdas cómo empezaste con Leonardo? Mira lo que tienes alrededor.
Y estábamos saliendo del castillo rodeados por un grupo de niños de síndrome de Down. Y entonces se cerró el círculo de una manera tan bonita que dices ¿casualidad? Pues igual sí, pero fue tan bonito, tan chulo, que me empezó a apasionar una cosa a la cual no iba predispuesto a apasionarme.
– En toda esta investigación ¿qué ha descubierto de estos personajes?
Eran menos genios de lo que nosotros pensamos y más humanos y más personas.
Como lección artística, que Leonardo tiene menos, muchísimos menos enigmas de los que la gente cree. Pero, los que tiene son mucho más importantes de los que la gente piensa, y van más allá de si María Magdalena está pintada en la última cena. Sin embargo, Miguel Ángel tiene muchísimos más. Hay siempre más de lo que nuestros ojos ven y está ahí.
– ¿Con cuál de los dos “genios” se queda?
¿Para qué? (sonríe y se encoge de hombros) ¿Cómo artista? El mejor artista de la historia es Miguel Ángel, pero es que Leonardo no era artista, era un científico que hacía arte. Incluso La Última Cena es una composición matemática de perspectiva. A Leonardo le daba igual lo que estuviesen cenando en ese momento.
Si tú vas al refectorio de Santa María de las Gracias y te pones en un punto determinado de la sala, cosa que hacen mal los guías, es un trampantojo perfecto, es una pasada. A Leonardo lo que le preocupaba era eso, la perspectiva. Pero también hay más mensajes ocultos, y todos son matemáticos.
– Sin embargo, parece ser que el mejor pintor y el más normal de todos era Rafael y no ha tenido tanta repercusión histórica…
El problema de Rafael es que murió joven. A Miguel Ángel le faltaban 3 días para cumplir 89 años cuando murió, Leonardo murió con 67 y Rafael tenía 38. Si Rafael llega a vivir 25 años más se los carga a los dos, pictóricamente hablando. Era capaz de asimilar lo mejor de uno y lo mejor de otro, plasmarlo y fusionarlo. Si hubiese vivido más años, no sé si hubiese estado en el Top 1, pero en el Top 3, sí, hablando del Renacimiento italiano.
Se desconoce tanto porque, primero, que yo sepa, hasta la fecha no dejó mucho escrito. Leonardo, por ejemplo, creo que es la persona que más páginas ha escrito en la historia de la humanidad, y no se estudia en literatura. Y Miguel Ángel dejó escritos un montón de poemas y de cartas a sus familiares y así se puede leer cómo era en realidad. Pero en el caso de Rafael no se puede leer nada. Además, los últimos años de su vida fueron un enigma, sobre todo, por la forma en la que murió, con las fiebres, que él no quería confesar que había sido por una noche de sexo con una persona que no debía.
Pero vamos, Rafael es maravilloso.
– Atentado contra la iglesia católica por plasmar pinturas judías, dejar retratada su homosexualidad, llegando a dibujarse él mismo, incluso, según cuenta en su libro, llegó a retratar el culo de Dios. Realmente, ¿era para tanto o se han encontrado siempre más aristas de las que tiene el tema?
Pero juego con la doble vertiente, es decir, ¿quién comete el atentado, Miguel Ángel o Carlos V?
Como de Miguel Ángel está todo a la vista, todo expuesto y se le conoce tanto, uno no se ha parado a pensar realmente lo que quería decir Miguel Ángel con la obra. Leonardo es más críptico, pero porque era más científico. Pero de Miguel Ángel hay cosas que yo todavía no me explico, ¿cómo no demolieron la bóveda de la Capilla Sixtina?
– Hay muchos ejemplos en el libro, pero seguro que hay muchos más…
Si, cuando Miguel Ángel pinta las figuras desnudas en El Juicio Final, se le encarga taparlas y él se niega a hacerlo. Por eso, se contrata al Braguettone, que es el que pintó las partes cubriendo todas las figuras. Pero aparece cada mensaje en esa pintura…Es decir, estamos hablando del segundo advenimiento de Cristo, separa los justos de los pecadores, estamos hablando de la apocalipsis de San Juan, es decir, estamos hablando del final del Segundo Testamento y de repente, te mete figuras paganas o mete a hombres besándose con hombres… ¡eso es muy fuerte! Entonces, ¿de verdad te estás preocupando de tapar el pene, que no se lo tapas a Adán, que lo pinta 20 o 30 años antes, no se lo tapas y lo tapas ahora?¿Y no tapas a tíos besándose? , cuando hay ciertas partes de la iglesia que consideran que la homosexualidad es una enfermedad. Ahí hay un problema. Y como eso hay muchísimas cosas más, no desde el punto de vista sexual, sino desde el punto de vista científico.
– Llamativo sí que es…
A mí me llama mucho la atención, porque ¿de verdad no se dieron cuenta?¿eran tan poco letrados en la época?¿se dieron cuenta y quisieron sacar una ventaja económica? Es que hay muchas dudas ahí. Y hay que contar que Miguel Ángel sobrevivió a todo eso, claro. Mientras que Galileo, 50 años después tuvo que pedir perdón o Giordano Bruno, que le cosieron la boca y lo mataron por decir que Copérnico tenía razón. Entonces dices, ¿Y Miguel Ángel cómo lo tapó?
Lo que pasa es que lo importante tampoco es el qué, que es lo que intento descifrar en la novela, sino el cómo, el por qué, ¿por qué lo hizo?
– Después de leído, a mí, personalmente, me parece un libro que debería ser de lectura obligada en los colegios e institutos, en clase de historia…
Ojalá (sonríe). Lo que pasa que por ejemplo, Leonardo, ¿dónde lo estudias? ,se hace en historia del arte,pero no se estudia en medicina, ni en literatura, ni en matemáticas. Y Leonardo era matemático.
Hay un error, lo que Leonardo menos hacía era pintar. Leonardo era un científico. De las 14 ramas del saber que dominaba , una era la pintura, quedaban otras 13. Yo creo que eso es lo que falta, y sobre todo, los valores. Cuando la gente lee el libro anterior, el de Leonardo, dicen que no sabían que era ilegítimo, disléxico, bipolar y con déficit de atención. Pero es que hay niños que hoy también ,y lejos de darles pastillas,hay que darles algo que les llame la atención, que les apasione, que les motive, Leonardo no tenía pastillas. Creo que es la manera de contar las cosas.
Lo que pasa es que cuando se trata de una novela histórica, estamos hablando de ficción desde una base sólida, bajo mi humilde punto de vista, de documentación.
– Precisamente por toda esa documentación no sólo es ficción…
No sólo hay mucho de real, históricamente hablando, sino que alguno de los motivos que yo le otorgo a Miguel Ángel, desde el punto de vista del investigador. Es decir, mi tesis es esta, lo que pasa que yo te la novelo, pero yo sería capaz de defendértelo en un congreso. Pero considero que no es la verdad, que es mi verdad. Entonces creo que cuando el sistema educativo se basa en la verdad de alguien es un poco dictatorial.
– Pero ha estudiado magisterio, educación primaria, si tuviera que hablarle a los niños de estos personajes, ¿qué les contaría?
Siempre nos los pintan como los genios de la humanidad y a mí, contarle a un niño que son unos genios de la humanidad es como decirle, son inalcanzables, nunca llegarás a eso. Si le doy la vuelta y le cuento lo mismo, diciéndole que es una persona como él. Que en el caso de Leonardo, por ejemplo, que tuvo TDA (Trastorno por Déficit de Atención), que sufrió de la fuga de cerebros. Que Miguel Ángel era un incomprendido… Entonces, es lo que el niño ve a su alrededor, es decir, piensa que puede alcanzarlos. Prefiero enseñarles no ídolos, sino referentes.
– ¿Qué diferencias hay entre ídolos y referentes?
Ídolos es cuando a alguien lo admiras por encima de todas las cosas y no eres capaz de admitir sus fallos. Y el referente es aquel a quien admiras, a pesar de los fallos, porque de los fallos también se aprende. Y hay que enseñar la genialidad de estos tipos, pero desde el punto de vista del fracaso, porque todos fracasaron. Sería una enseñanza desde el punto de vista moral.
Lo que nadie te cuenta, por ejemplo, es por qué el Adán de Miguel Ángel tiene un ombligo. Hay gente que piensa que se equivocaría, te aseguro que Miguel Ángel no se equivocó, todo tiene un por qué. Creo que nada era fruto de casualidad, me refiero desde el punto de vista científico. El ombligo de Adán no es casualidad.
– Está lleno de mensajes ocultos…
No, está lleno de mensajes prohibidos a la vista. Según el Antiguo Testamento, Eva coge la manzana del fruto prohibido y comienza el pecado original. La palabra manzana no aparece en la Biblia, como los 3 reyes magos, tampoco aparecen en la Biblia. Es un higo lo que coge. Miguel Ángel lo que pinta es a Adán cogiendo la fruta prohibida, con lo que exime a la mujer del pecado original. Y esto está a la vista, no es un mensaje oculto.
Son mensajes muy visibles, pero se está cargando el Antiguo Testamento, se ha cargado el origen divino
-Bajo su punto de vista, ¿qué cree que quería decir dibujando el ombligo de Adán?
¿Son mensajes ocultos? No, son mensajes muy visibles, lo que pasa es que nadie nos paramos pensar que Adán tiene ombligo, si no tuvo madre.
Se está cargando todo el Antiguo Testamento, el Génesis se lo acaba de cargar. Sólo el hecho de pintar un ombligo, ya le está dando importancia a la ciencia y no a la religión. Darwin y el origen de las especies vienen mucho después. Se está cargando el origen divino.
Pero es muy fuerte porque lo pintó donde está pintado. Le dio importancia a la ciencia, un tío creyente, porque Miguel Ángel era creyente. Es como el eclipse que ve Copérnico entre 1497 y 1500 en Roma, con Miguel Ángel y de repente ¿aparece Dios señalando el sol? (se encoge de hombros) ¿tiene algo que ver o no? No o sí. El caso es que lo pinta.
– Hay muchos ejemplos de este tipo…
No lo termino de desarrollar mucho en la novela, pero hay figuras cristianas, con la cara del Papa, y putis, esos pequeños ángeles haciéndoles así (levanta el dedo índice y corazón, como la señal de victoria. Me explica que en Italia, en el S. XV, eso significaba nuestro gesto actual de levantar el dedo corazón, en señal de gesto obsceno. En Inglaterra se sigue haciendo así). Pues ángeles haciendo esto en la cara del Papa. ¿Son mensajes ocultos? No, están ahí, pero hay que saber leer esos mensajes.
Pero aunque no se sepan leer hay muchas cosas que llaman la atención. En el panel de la creación de Eva, Eva no sale de una costilla, por ejemplo. Hay un poder de reivindicación, primero de la ciencia, luego de la mujer, o viceversa.
– Le dedica un capítulo entero a El Laocoonte… (estilo escultórico que exagera las formas del cuerpo)
Miguel Ángel cambia todo y con él surge el marianismo, que es un movimiento histórico-artístico. Miguel Ángel decide que las figuras tienen que ser como El Laocoonte. Le dedico el capítulo entero porque es que ese descubrimiento para Miguel Ángel, supuso un cambio en la historia del arte.
– Para finalizar, he leído que es un poco “freak” y que no le importa que le llamen así, que tiene una colección de 7.000 cómics. Y ahora, mi última pregunta y no vale que “pase palabra” ¿Ha visto los capítulos de Futurama y de Los Simpson sobre Leonardo Da Vinci? Se trata de una gran repercusión de estos dos genios italianos, tanto que llegan a ser plasmados por los estadounidenses…
(Se ríe) De los simpson no, porque no me gustan. Pero Futurama claro que sí me gusta. Futurama me apasiona (lo dice con la voz del doctor Zoidberg, personaje de la serie)
Aunque luego ves Da Vinci Demons y quieres contarte las venas. Es que ellos los crean como héroes de acción de cómics y no son héroes de acción, son personas de carne y hueso que lo pasaron muy mal y que es lo que tienen que aprender los niños, que a pesar de ese fracaso, ese fracaso no deja de ser más que un paso más de aprendizaje, ya está.