ZBN./ Con la llegada del verano, las piscinas abren sus puertas y se convierten en lugares habituales de los ciudadanos para resistir mejor el calor. Por ello, la Unión de Consumidores de Aragón destaca algunos requisitos que, según el Departamento de Sanidad, Bienestar Social y Trabajo, deben reunir las piscinas de uso público en nuestra Comunidad.
Éstos son generales para todas las piscinas de uso colectivo en Aragón, teniendo en cuenta que a estas normativas se sumarán las impuestas por cada ayuntamiento donde estén ubicadas, cuando las piscinas son de carácter municipal.
Condiciones higiénico-sanitarias:
En las piscinas de uso colectivo el agua deberá ser filtrada y desinfectada; no será irritante para la piel, ojos o mucosas y deberá cumplir los parámetros físico-químicos y microbiológicos. No obstante es recomendable ducharse antes y después de bañarse en la piscina.
Las zonas o áreas de comida y bebida deberán estar localizadas en lugares totalmente independientes de las zonas de baño o piscinas, de tal manera que no puedan existir riesgos higiénico-sanitarios.
No podrá accederse a las zonas de playas y vasos de las piscinas con ropa y calzados de calle. No se abandonarán desperdicios dentro del recinto de las piscinas e instalaciones, debiendo utilizarse las papeleras y otros recipientes destinados al efecto.
Hay que utilizar las duchas antes de entrar en las piscinas. Se recomendará expresamente el uso de gorro de baño.
Socorristas:
Toda piscina de uso colectivo cuya superficie de agua supere los 240 m2 deberá contar al menos con un socorrista acreditado.
Cuidado con los niños:
Las piscinas de chapoteo generalmente destinados a menores de 6 años, debe tener una profundidad no superior a los 50cm. El fondo no ofrecerá pendientes superiores al 10%. Los niños deben estar siempre acompañados por una persona mayor siendo el sistema flotador más recomendable el de los manguitos.
Seguridad en piscinas:
Excepto en las piscinas infantiles o de chapoteo, deberán instalarse escaleras de acceso al vaso de la piscina; como mínimo habrá cuatro colocadas en las correspondientes esquinas, o lugares equidistantes en otras formas geométricas.
Las escaleras estarán construidas con materiales inoxidables, susceptibles de fácil limpieza, siendo sus dimensiones suficientes para ser utilizadas con comodidad y alcanzando bajo el agua la profundidad necesaria, a fin de que el usuario pueda salir fácilmente de la piscina.
Existirán flotadores salvavidas en número no inferior a las escaleras instaladas, y estarán situados en lugares visibles y de fácil acceso para los bañistas. En las piscinas recreativas y polivalentes se prohíbe la existencia de palancas de saltos y trampolines por ser un factor de riesgo de accidentes, quedando su uso reducido a los fosos y piletas de saltos destinados exclusivamente a estos fines o a la competición.
Botiquín:
Todas las piscinas de uso colectivo dispondrán de botiquín que deberá contar como mínimo de una camilla basculante, equipo de respiración artificial con accesorios adecuados para niños y adultos, y material de primeros auxilios. Además deben disponer de teléfono y tener expuesto en lugar bien visible información de los servicios de urgencia, centros de salud y de asistencia hospitalaria más cercanos, y servicios de ambulancia.
Además de las normas de seguridad, los bañistas han de tener en cuenta otras recomendaciones para evitar:
Hongos: Tomar ciertas medidas higiénicas, como quitarnos las zapatillas solamente para bañarnos.
Conjuntivitis: el cloro de las piscinas puede producirnos conjuntivitis e irritaciones en los ojos, por lo que es recomendable utilizar gafas de baño.
Corte de digestión: para evitar estos cortes de digestión es bueno esperar tres horas después de la comida para bañarnos. Aún así se debe entrar en el agua poco a poco.
Insolaciones/quemaduras: para evitar las quemaduras es necesaria la utilización de cremas solares. Estas deben ser de alta protección si es la primera vez que nos exponemos al sol o si se trata de niños. Igualmente es necesario utilizar gorros que nos protejan del sol.
Deshidratación: es conveniente beber mucha agua, sobre todo si estamos durante mucho tiempo expuestos al sol.
Accidentes por zambullidas: tenemos que asegurarnos de la profundidad del lugar en relación a la estatura del bañista y a la altura desde la que uno se lanza (a mayor altura, mayor profundidad). Antes de sumergirse de cabeza es preferible hacerlo de pie o irse introduciendo poco a poco en el agua.