Redacción./ La antigua línea del ferrocarril Santander Mediterráneo volverá a estar en uso dentro de muy poco. La empresa pública TRAGSA está concluyendo las obras de construcción de la Vía Verde del Ribota y del Jiloca, un Camino Natural de nueve kilómetros de longitud que discurre íntegramente por el término municipal de Calatayud, y parte desde el fin de la línea en Paracuellos de Jiloca hasta Torralba de Ribota.
El proyecto financiado por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente forma parte del ‘Programa de Caminos Naturales’ y estará acabado a finales de julio. La empresa ha terminado el adecentamiento del suelo y ha actuado en dos puentes. Queda pendiente la instalación de mobiliario, mesas, bancos, aparcabicicletas, balizas y paneles informativos, que llegarán a comienzos de julio.
La concejal de Medio Ambiente, Esther Herrero, visitó ayer el estado de las obras con la técnico de su departamento y un responsable de la empresa ejecutora, “estas vías recorren un paraje natural de gran belleza y las vistas tanto de la ciudad, como del Castillo Mayor y del yacimiento de Bílbilis van a contribuir a que se convierta en un atractivo turístico”, explica la concejal. Estas vías permitirán el paso exclusivo de bicicletas y peatones, quedando prohibido el paso de vehículos a motor (coches, motos, quads, etc.) ni de caballos u otros animales como rebaños de ovejas, ya que dañarían el firme.