ZBN./ De acuerdo con las estimaciones realizadas por el Instituto Aragonés de Estadística (IAEST), el PIB aragonés creció un 0,6% en tasa trimestral durante el primer trimestre de 2016, mientras que en términos interanuales anotó un incremento del 3,1%, superior al alcanzado por el conjunto de países de la Zona Euro (1,7%), pero ligeramente por debajo de la cifra registrada por el conjunto de España.
El pulso de actividad de la Comunidad Autónoma durante los primeros tres meses de 2016 habría venido motivado tanto por la fortaleza de la demanda interna, aunque ésta presenta un comportamiento desigual de sus componentes principales, como por la mayor aportación negativa al crecimiento por parte del sector exterior. Además, todos los sectores productivos de la economía aragonesa experimentan en el trimestre tasas de crecimiento anuales positivas.
Por último, los indicadores parciales disponibles hasta el momento señalan, en general, hacia una continuación de la actual fase de crecimiento de la economía aragonesa durante el conjunto de 2016, algo que también se observa en los últimos datos referentes al mercado laboral.
Suave aceleración en el crecimiento global
Los indicadores de actividad económica indican que se ha producido una tendencia a la suave aceleración en el crecimiento global a lo largo del primer semestre del año, fruto de un mejor desempeño por parte de las economías avanzadas, basado en el vigor de sus demandas internas, combinado con un panorama dispar entre los emergentes, donde conviven el dinamismo de India con la desaceleración en China y las recesiones de Brasil y Rusia.
A nivel nacional, en el primer trimestre de 2016 la economía española mantuvo un ritmo de avance intertrimestral similar al experimentado en el último tramo de 2015 (tasa de variación positiva del 0,8%). Por su parte, en términos interanuales el crecimiento fue del 3,4%. El crecimiento sostenido de la economía española en los primeros tres meses de 2016 tiene su origen en una menor aportación negativa al crecimiento del sector exterior, ya que la contribución positiva de la demanda nacional al PIB ha disminuido.