– Las ayudas para incentivar una reducción voluntaria de la producción de leche enmascaran un plan de abandono encubierto al tiempo que favorecen una deslocalización de la producción en favor de los países del centro y norte de Europa y los intereses de industria y cadenas de distribución.
– COAG reitera que las soluciones eficaces para reactivar los precios al ganadero pasan por una reducción obligatoria a nivel comunitario que sirva para liberar excedentes del mercado.
Madrid, 19 de julio de 2016. La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) califica de “trampa” el nuevo paquete de medidas presentado ayer por la Comisario de Agricultura, Phil Hogan, para apoyar a los agricultores y ganaderos ante las dificultades del mercado, en especial las del mercado de productos lácteos.
Esta organización rechaza los nuevos planteamientos porque:
1. El Programa de reducción voluntaria de la producción de leche (dotado con 150 millones de euros) enmascara un plan de abandono encubierto al tiempo que favorece una deslocalización de la producción en favor de los países del centro y norte de Europa y los intereses de industrias y cadenas de distribución. “Es inaceptable que el ajuste del mercado lácteo europeo se quiera realizar a costa de la desaparición de miles de explotaciones, sobre todo de los países del sur de Europa, caso de España. Países como Irlanda, Alemania, Dinamarca y Holanda nos quieren expulsar del mercado para acapararlo. De nada sirve que los ganaderos que peor lo están pasando se acojan a una reducción indemnizada si el resto aumenta la producción de forma paralela”, ha lamentado Miguel Blanco, Secretario General de COAG. Esta organización reitera que las soluciones eficaces para reactivar los precios al ganadero pasan por una reducción obligatoria a nivel comunitario que sirva para liberar excedentes del mercado y ajustar oferta a demanda.
2. La excepcionalidad respecto al pago de la ayuda acoplada 2017 a los ganaderos de leche está vinculada a la medida anterior porque pretende estimular la reducción de la cabaña y la reestructuración del sector. COAG considera que esta medida es contradictoria con el espíritu de las ayudas acopladas, instauradas en un principio para ayudar a los sectores en crisis a mantener sus explotaciones. Además, supone una trampa para el ganadero ya que aquellos que reduzcan su cabaña en 2017 verán reducido el importe de la ayuda acoplada en 2018 y años sucesivos.
3. Asimismo, COAG considera que la extensión de la intervención pública de leche en polvo y la ampliación de los regímenes de ayudas al almacenamiento privado de la misma no tendrá ningún tipo de efecto en el mercado si no va acompañada de una subida de los precios de intervención. Lejos de ello, supone un incentivo para que la industria mantenga los precios a la baja.
4. Tal y como venía reivindicando, COAG considera necesaria la actualización de la ayuda para la retiradas de frutas y hortalizas realizadas por la Organizaciones de Productores, pero estará vigilante para ver en qué se concreta a nivel presupuestario esta declaración de intenciones.
Fuente: COAG