Redacción./ Acercar el arte y el patrimonio de Tarazona a lo más pequeños. Ese ha sido el objetivo de los Talleres de Arte y Patrimonio Lúdico que la Fundacion Tarazona Monumental organiza cada verano y en los que han participado un total de 40 niños, cubriendo todas las plazas.
La FTM hace un balance muy positivo de estos talleres que están muy consolidados dentro de las actividades programadas. “La propuesta ha resultado todo un éxito. La mayoría de los que estaban apuntados al turno de julio han querido repetir en agosto y, algunos que solo estaban apuntados un día, han terminado viniendo a todos los talleres porque se lo pasaban muy bien”, ha explicado la técnico de Patrimonio de la Fundación Tarazona Monumental Isabel Ibáñez.
Como el año pasado se han realizado diferentes sesiones, con ocho actividades distintas en las que los participantes han conocido las profesiones relacionadas con la restauración y conservación del patrimonio y las técnicas artísticas.
Los talleres se han desarrollado en la Catedral de Santa María de la Huerta, donde han conocido el Gótico, el estilo Mudéjar, construyendo su propia torre, y el Renacimiento, donde se ha hecho especial énfasis en las grisallas que han dado el nombre de Capilla Sixtina del Renacimiento español a la seo.
Asimismo, se han aproximado al Barroco, trabajando la técnica del estuco, han aprendido sobre arqueología, excavando y reconstruyendo los restos que han encontrado, y también sobre los animales de la Catedral, la iconografía de las representaciones más importantes, pudiendo creando sus propios atributos, y los retablos.
Tal y como ha destacado el gerente de la Fundación Tarazona Monumental, Julio Zaldívar, “para nosotros es fundamental desarrollar este tipo de actividades porque con ellas acercamos el patrimonio a las generaciones futuras y les concienciamos de la importancia de su conservación”.