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Herrera y Villar de los Navarros acogen la II Recreación histórica de la batalla carlista de 1837

Redacción. Por segundo año consecutivo, las localidades de Herrera, y Villar de los Navarros, pertenecientes a la Comarca Campo de Daroca, volverán a celebrar la recreación de la importante batalla carlista, que tuvo lugar en campos situados entre ambas poblaciones, el 24 de agosto de 1837.

La iniciativa corresponde a las alcaldías de las dos poblaciones zaragozanas (José Luis Prats es el alcalde Villar de los Navarros y Enrique Felices el de Herrera de los Navarros), hermanas no solo por su nombre y proximidad geográfica –están situadas a escasos kilómetros una de la otra–, sino también por su historia antigua y reciente. Asimismo, esta iniciativa cultural cuenta con el apoyo económico de la Diputación Provincial de Zaragoza, así como, con la colaboración de la Comarca Campo de Daroca, de la que es presidente Francisco Javier Lafuente, a través de la Agencia de Desarrollo Local de dicha comarca.

Las actividades que se llevaron a cabo el año pasado, centradas en aquella ocasión en la localidad de Herrera de los Navarros, superaron todas las expectativas de los organizadores, destacando el nutrido público, de todas las edades, que asistió (llenando por completo la plaza de la localidad), a la histórica primera representación teatral de la batalla que llevó a escena la compañía aragonesa de teatro “Los Navegantes”.

Conferencias. Para este año, las actividades previstas dentro de la programación desarrollada para la recreación de de la «Batalla carlista de Villar de los Navarros de 1837», figuran dos conferencias que impartirá el historiador y periodista Luis Negro Marco (asesor histórico de la recreación), acerca de aquel acontecimiento. La primera de ellas tendrá lugar el día 26 de agosto, a las 12 de la mañana, en el salón recreativo-cultural de Villar de los Navarros, bajo el título: «Villar de los Navarros: Historia y trascendencia histórica de una batalla». La siguiente de las conferencias que impartirá el historiador aragonés (natural de la localidad turolense de Bello) se desarrollará al día siguiente ( domingo, 27 de agosto, y a la misma hora) en la Casa de la Cultura de Herrera de los Navarros, y versará sobre “Las Repercusiones de la batalla en sucesos posteriores de Aragón: La Cincomarzada de Zaragoza”.

Presentación de una gran maqueta sobre la batalla. Una importante novedad en la recreación de este año, será la presentación de una gran maqueta representando la geografía del terreno, así como la infantería, caballería y artillería de los ejércitos que estuvieron presentes en la batalla carlista de Villar de los Navarros el 24 de agosto de 1837.

La maqueta está integrada por cientos de miniaturas de soldados de plomo, pintadas a mano, y ha sido realizada, durante seis meses, por el reputado maquetista coruñés Juan Fernández Guinda, autor de numerosas obras, depositadas muchas de ellas, en algunos de los más importantes museos militares de España.

Relevancia histórica de la recreación. La batalla carlista de Villar de las Navarros es interesante desde el punto de vista histórico por varios aspectos. El primero de ellos es la constatación del vínculo antropológico –mas allá de la evidente toponimia – existente entre las localidades de Villar y Herrera de los Navarros con el antiguo Reino de Navarra. No en vano, las localidades zaragozanas llevan su gentilicio por haber sido repobladas estas tierras por navarros, una vez hubieron sido conquistadas por los reyes aragoneses.

Asimismo, que una batalla carlista de este calibre hubiese tenido lugar fuera de territorio vascongado y navarro, pone de manifiesto que el sentimiento y la presencia de los ideales carlistas en Aragón fueron mucho más importantes de lo que hasta ahora se había considerado. Un hecho que probablemente se debió al fuerte arraigo social que las leyes forales tenían en Aragón, como lo demuestra la existencia de una figura única, inexistente en el resto de España, como es el Justicia, cuya misión fundamental, precisamente, era la defensa de los fueros frente al poder real.

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