Redacción. Siguiendo el comportamiento habitual en el mes de enero, el paro registrado ha crecido respecto al pasado diciembre, en este caso de forma más acusada en Aragón (4,28%) que en el conjunto de España (2,85%). En comparación anual, el número de personas desempleadas se ha reducido un -2,06% en Aragón, frente al
-0,97% nacional, en ambos casos siguiendo la tendencia de reducciones cada vez más moderadas.
Aragón continúa, por tanto, con mejor tasa de paro que España 9,93% frente a 13,78% según la EPA del IV trimestre de 2019), pero con una mayor desaceleración de su reducción desde que se comenzó a sentir el efecto de la ralentización económica en el empleo.
Sectores
En Aragón, el desempleo solo cae mensualmente en Agricultura (-0,11%), aumentado en todos los demás sectores. Preocupa especialmente que la Industria sume ya siete meses consecutivos de aumentos, aunque el sector con peor comportamiento este mes es Servicios con un aumento del 5,84%. En términos interanuales, se siguen registrando descensos del paro en todas las ramas de actividad salvo en Construcción.
Por provincias, Huesca es la que sufre el mayor aumento mensual (6,53%), por delante de Teruel (4,43%) y Zaragoza (3,90%). No obstante, la provincia oscense es también la que muestra la caída interanual más intensa (-2,89%), seguida de Zaragoza (-2,03%) y Teruel (-1,06%).
La afiliación a la Seguridad Social ha descendido mensualmente en Aragón (-1,01%) y España (-1,26%) y aumentado respecto a enero del año pasado (1,87% y 1,83%, respectivamente).
Reacciones
El presidente de CEOE Aragón ha señalado que “estos datos deben hacernos reflexionar” sobre algunas decisiones de política económica y laboral, buscando revertir esta tendencia con el compromiso de todos y con “dando confianza a las empresas”. A ello no ayudan mensajes sobre subidas de impuestos, derogación de la reforma laboral o decisiones como la reciente subida del SMI, que desincentivan las contrataciones.
CEOE Aragón considera necesario que desde las Administraciones se facilite la actividad de las empresas, apoyando el crecimiento y condiciones de desarrollo de las ya instaladas y la consolidación de sus empleos, además de buscando nuevos proyectos de inversión que se sumen al tejido productivo. La fiscalidad, el fomento de la inversión, la reducción de costes y burocracia son, junto al diálogo social, elementos fundamentales para ello.