Redacción. El Ayuntamiento de Zaragoza convocará el próximo septiembre una tercera línea de ayudas para la innovación comercial por valor de 226.000 euros dada la buena acogida que tuvieron los dos paquetes de subvenciones planteados por la Consejería de Economía, Innovación y Empleo en mayo. El nuevo montante económico volverá a estar dirigido al sector comercial aunque abriendo a la hostelería y la restauración la posibilidad de que presenten sus proyectos de digitalización.
En total este año, la Consejería va a destinar a la actualización tecnológica de los establecimientos de la ciudad 706.000 euros, triplicando así las ayudas que se concedieron en el pasado ejercicio. «Los negocios locales tenían ya detectada la necesidad de digitalizar sus negocios para poder competir. La COVID-19 ha acelerado esos procesos, ya no son solo urgentes, son imprescindibles para su supervivencia», ha destacado la consejera de Economía, Innovación y Empleo del Ayuntamiento de Zaragoza, Carmen Herrarte.
«El esfuerzo económico que estamos haciendo desde la Consejería para llevar adelante estos apoyos económicos ha sido prioritario para nuestro gobierno PP-Ciudadanos. Porque gestionar es priorizar, en este momento los negocios locales son para nosotros prioritarios», concretaba la consejera.
El pasado 8 de junio se cerró la convocatoria para que las asociaciones y federaciones de comerciantes de Zaragoza pudieran presentar proyectos a las dos líneas de ayudas para la innovación, digitalización y promoción comercial impulsadas por la Consejería. En total, cerrado el plazo, a los dos paquetes de subvenciones se han presentado 84 proyectos, que suman un montante económico de 2.602.559 euros de inversión. «Los autónomos y empresarios de nuestra ciudad son muy dinámicos y están luchando para modernizar y salvar sus empresas y, por lo tanto, el empleo que generan. Nuestra obligación es ayudarles y ponerles las cosas fáciles, en la medida de nuestras posibilidades», ha asegurado el coordinador del área, Javier Puy.
Concretamente, en la línea de ayudas a la innovación comercial, dotadas con 260.000, se han presentado 22 propuestas dirigidas sobre todo a la creación de apps, plataformas para la promoción o marketplace. En este caso los proyectos tenían un mínimo de subvención de 30.000 euros y un máximo de 75.000 euros.
A la propuesta de ayudas a la digitalización y promoción, que tiene una partida de 220.000 euros, se han presentado 62 proyectos. Entre ellos se han diseñado aplicaciones digitales, acciones de publicidad, animación comercial, realización de campañas promocionales o soluciones para el comercio electrónico. En este caso, los proyectos de la línea de digitalización tienen una subvención mínima de 10.000 euros y una máxima de 30.000 euros, y la horquilla de ayudas para la promoción varía entre los 2.000 euros y los 6.000 euros.
En estos momentos se está procediendo a la revisión de la documentación de todas las solicitudes. Si falta algún documento los implicados tienen 10 días para subsanar cualquier problema. Transcurrido ese tiempo, el área de Mercados abrirá la fase de valoración. Será una comisión formada por al menos tres técnicos municipales la encargada de evaluar las propuestas. Durante el mes de julio se concretarán los proyectos definitivos que se van a financiar.
Nueva línea para septiembre
Dada la buena acogida que han tenido las dos líneas de ayudas convocadas en mayo, la Consejería de Economía, Innovación y Empleo ha decidido sacar otra tercera para el mes de septiembre. De nuevo estará dirigida al sector comercial, aunque con la posibilidad de que también presenten proyectos negocios vinculados a la hostelería y la restauración. «El sector ha presentado proyectos de innovación comercial solventes. Nuestra apuesta es impulsar proyectos tecnológicos ambiciosos que den soluciones a colectivos. Hemos decidido reeditar las ayudas, ampliándolas a la hostelería, para poder sacar adelante más proyectos con los que avanzar en la digitalización del sector», ha cerrado Carmen Herrarte.
El dinero previsto para esa nueva línea son 226.000 euros y los interesados deberán trabajar en un proyecto de innovación tecnológica a través de una asociación o federación, para modernizar y adaptar los negocios a las necesidades de los nuevos clientes.