Redacción. El Ayuntamiento de Zaragoza ha ordenado de manera urgente el desalojo temporal de los vecinos del número 12 de la calle de José Zamoray tras detectarse una sima bajo el edificio que alcanza a un pilar y a parte de un muro de carga, lo que amenaza la estabilidad de la estructura. La detección de esta oquedad se ha realizado durante los trabajos de adecuación del solar que ocupaban los edificios 8 y 10 de la misma calle y que el pasado 29 de mayo tuvieron que ser desalojados por un colapso en los edificios que suponía un riesgo de ruina inminente, lo que provocó su demolición, de manera subsidiaria, por parte del área municipal de Urbanismo.
Durante las tareas de aseguramiento del interior de las parcelas 8 y 10, “nos hemos encontrado una sima bajo el número 12, una oquedad con una profundidad de unos 3 metros y un diámetro de unos 5 metros. Se trata de una sima seca como consecuencia de la aportación de aguas en su día, en un largo periodo de tiempo”, ha apuntado el gerente de Urbanismo, Miguel Ángel Abadía, quien ha reseñado que “esta misma causa fue también la que afectó a la estabilidad de los números 8 y 10, donde había otra sima diferente que terminó provocando el colapso de estos edificios el pasado mes de mayo”.
Ante esta situación, se va a proceder al relleno mediante inyección de hormigón de la sima con el fin de estabilizar el edificio del número 12. Se trata de una actuación para la que, con el fin de realizarla con todas las garantías de seguridad, se ha decidido desalojar de forma preventiva a los vecinos, quienes podrán regresar a sus casas a partir del viernes. No obstante, se ha activado el protocolo municipal establecido para estos casos y miembros de Policía Local y técnicos de Acción Social del Ayuntamiento de Zaragoza han acudido al edificio para contactar con los residentes y ofrecerles, en caso de no contar con red familiar o amigos, una alternativa habitacional hasta que finalicen las tareas.
“De las cinco viviendas las que cuenta el número 12, amparadas por un contrato de arrendamiento o de propiedad, sólo cuatro están habitadas y únicamente ha sido necesario buscar una alternativa de vivienda a uno de los vecinos”, ha manifestado el jefe de servicio de Servicios Sociales Comunitarios del Ayuntamiento de Zaragoza, Francisco Rivas, quien ha recordado que “en este caso podrán volver, pero hay otras situaciones, como fueron las de los vecinos del número 8 y 10, en las que intervinimos a largo plazo porque no había opción de regresar, ya que tuvieron que ser derribados los edificios”. No obstante, ha apuntado Rivas, “el Centro Municipal de Servicios Sociales de San Pablo se mantendrá atento a las distintas situaciones que pudieran derivarse de este desalojo temporal”.