Redacción. El Mercado Ambulante de La Almozara, ubicado en el Parking Sur de la Expo, montará el próximo domingo día 1 de noviembre al 25%, tal y como marca el decreto del Gobierno de Aragón tras la declaración de la alerta 3 y el confinamiento de la ciudad de Zaragoza. A pesar de que durante los últimos días la propia junta del mercado había declinado el montaje por causas económicas, esta misma mañana un grupo de vendededores ha presentado una solicitud de apertura en el Ayuntamiento de Zaragoza para poder montar sus puestos. El trámite se ha realizado a primera hora de la mañana y el Servicio de Mercados del Ayuntamiento de Zaragoza ya ha preparado todo lo necesario para que el próximo domingo los detallistas puedan trabajar.
El montaje de los puestos se hará cumpliendo todas las medidas exigidas por parte del Ayuntamiento de Zaragoza tal y como manda el decreto del Gobierno de Aragón. De esta manera, van a poder montar el 25 por ciento de los 400 puestos que habitualmente montan en el Parking Sur de la Expo. “Esta misma mañana nos han solicitado la apertura. No se merecen menos, nos han pedido abrir el 1 de noviembre, sobre todo para vender flores, y les hemos dado el permiso”, ha explicado al consejera de Economía, Innovación y Empleo del Ayuntamiento de Zaragoza.
Cuando salió la normativa tras la entrada de Zaragoza en alerta 3, la junta se dirigió al Ayuntamiento y argumentó que no les salía rentable económicamente el montaje de los puestos. “Hoy han debido de hablar entre ellos y han cambiado de opinión. Nosotros, si quieren trabajar, adelante. Vamos a garantizar que se cumple la normativa y por supuesto que tienen nuestro respaldo para que el día 1 de noviembre abrir”, ha concretado la consejera Herrarte.
Medidas de seguridad
El recinto del mercado estará perimetrado con cintas uniendo todos los puestos y se van a instalar unas vallas para reconducir a los clientes. Habrá un único acceso que servirá de entrada y salida con el fin de controlar el aforo. De esta manera, desde el parking también se van a establecer caminos dirigidos para facilitar las entradas y salidas y evitar aglomeraciones. Los encargados del control de aforo serán funcionarios del Ayuntamiento junto a los voluntarios de la junta.
Los puestos que monten se situarán a 8 metros de distancia entre ellos y 12 metros hacia delante. Las colas para acceder al puesto se formarán delante de cada uno de ellos. Los clientes deberán guardar dos metros de distancia de seguridad, y se marcará con una cinta adhesiva la separación de entre 1,5 y 2 metros, desde el mostrador y los compradores. En cada uno de los puestos habrá carteles informativos para recordar a los clientes las medidas exigidas y serán los propios miembros de la organización los que controlen que se cumple el distanciamiento. Sólo sus responsables podrán manipular el género y queda terminantemente prohibido que los clientes puedan tocar los productos.
En cuanto a las medidas de higiene, todos los mostradores deberán estar desinfectados e higienizados adecuadamente y en cada uno de ellos habrá a disposición de los clientes geles para la correcta limpieza. Además, cada uno de los vendedores deberá ir provisto de guantes y mascarilla y realizar labores de limpieza en el puesto de forma continuada. El decreto también se establece que aquellos vendedores que puedan tener síntomas como fiebre, tos, dolor de garganta o dificultad para respirar deberán quedarse en casa y no asistir a la muestra.
Cada uno de los vendedores traerá sus propios equipos de protección, el Ayuntamiento repartirá guantes entre los clientes, se colocarán dispensadores de gel con pedal para facilitar el suministro, habrá control en los baños y en el acceso a la caseta de administración, donde los trabajadores municipales también dispondrán de todos los medios de protección exigidos por el decreto.