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Dra. Lambán: “La Traumatología es agradecida porque devolvemos al paciente su autonomía”

La Ortopedia moderna se interesa por el estudio de la forma y la función de sistema musculoesquelético. Su práctica está encaminada a paliar aquellas enfermedades de los huesos o tejidos blandos que dan lugar a la pérdida de la forma o de la funcionalidad de las extremidades y articulaciones. La Cirugía Ortopédica y Traumatología es una especialidad quirúrgica amplia y variada que ha experimentado profundos cambios, sobre todo en lo que se refiere al desarrollo de nuevas técnicas tanto en el campo diagnóstico, como en el terapéutico.

El Instituto de Traumatología Avanzada y Microcirugía de HLA Montpellier cuenta con médicos especializados en todas las áreas traumatológicas que el paciente necesita y son referentes en diferentes técnicas y tratamientos dentro de la sanidad privada zaragozana. La Dra. Noemí Lambán y el Dr. Eduardo Blanco lideran este equipo con una amplia trayectoria y experiencia adquiridas.

– ¿Por qué han decidido crear este proyecto?
– Nosotros, como especialistas, nos hemos formado en hospitales públicos con grandes servicios donde cada uno puede aportar ideas, técnicas, publicaciones… Por eso estamos ilusionados en trabajar en equipo, eso siempre enriquece y nos hace progresar científicamente aprendiendo unos de otros.

– ¿En qué áreas de la especialidad centran más su actividad?
– La cirugía ortopédica y traumatología es una especialidad muy amplia y aunque todo son huesos, tendones y músculos, dependiendo de la función que desempeñen o localización que tengan, su tratamiento puede ser muy diferente. Por eso, al formar equipo contamos con una amplia cartera de servicios en la que cada uno está más subespecializado en determinadas patologías: Cirugía de mano, cirugía de pie, artroscopia, artroplastias de cadera y rodilla.

– ¿De qué medios, tanto humanos como materiales, dispone el Instituto de Traumatología Avanzada y Microcirugía de HLA Montpellier?
– Nuestro equipo lo componemos tres traumatólogos, dos anestesistas, un médico general y tres diplomados en enfermería. Contamos con ecógrafo para realizar punciones ecoguiadas o bloqueos anestésicos, gafa lupa y microscopio para intervenciones de nervio periférico o mano, cirugía protésica asistida por ordenador para casos de artrosis complejos, terapias biológicas…

– ¿Cuáles son las patologías más comunes dentro de este servicio?
– Nuestra cartera de servicios es muy amplia, prácticamente tratamos la totalidad de las patologías de extremidades y con todas las técnicas presentes hoy día en el mercado.

– Uds. han profundizado mucho en la cirugía de pie y microcirugía de la mano. ¿Cuáles son sus principales aportaciones?
– Respecto a la cirugía de la mano nuestra principal aportación es la dedicación a ella desde que éramos estudiantes de Medicina, formándonos con múltiples cursos, congresos, rotaciones. El uso de la gafa lupa siendo un instrumento imprescindible para la cirugía de la mano. Realizamos técnicas artroscópicas en mano y muñeca, permitiéndonos reparar lesiones con abordajes mínimos que nos evitan las posteriores rigideces.

Organizamos el curso más antiguo de España de mano y microcirugía, este año hemos celebrado la XXXIV edición en el que se han formado miles de especialistas en cirugía ortopédica y en cirugía plástica.

Lo mismo que para la patología del pie, hemos realizado múltiples cursos, estamos en estrecho contacto con podólogos y pertenecemos a la sociedad de cirugía de pie y tobillo que nos mantiene actualizados.

Respecto a las prótesis contamos con el Dr. Rodríguez Chacón, que actualmente desempeña su trabajo enfocado principalmente a la Cirugía Reconstructiva Articular de Cadera y Rodilla, mediante técnicas artroscópicas y de reemplazo protésico, con gran experiencia en recambios complejos de cadera y de rodilla.

– ¿En qué casos está/n indicada/s esta cirugía/s? ¿Qué supone para el paciente este procedimiento?
– La microcirugía nos permite tratar estructuras de hasta un milímetro de calibre como nervios, arterias o tendones de la mano que a simple vista se lesionan con facilidad porque no se distinguen. El uso de la artroscopia nos permite solucionar patologías con mínimas incisiones, lo que evita rigideces y facilita rehabilitaciones más precoces. Las prótesis «a medida» no son la norma, pero para determinados casos complejos nos ofrecen una adaptabilidad de los componentes a la anatomía de cada paciente.

– ¿Hacia qué líneas de trabajo orientan su actividad para los próximos años?
– Nuestro trabajo va encaminado a la personalización de los tratamientos para cada paciente. No podemos tratar de la misma manera a pacientes de veinte años que a otros de ochenta años. Esto no quiere decir que a unos se les trate mejor o peor, significa que hacemos un “traje a medida” para cada situación dependiendo de la edad, la profesión, los hobbies, las enfermedades concomitantes…

¿Qué características personales creen que debe tener un buen cirujano traumatólogo, sobre todo en el sector privado?
– Ponerse en la piel del paciente y ofrecer soluciones prácticas y rápidas. Nosotros hemos trabajado muchos años en la medicina pública y ahora lo hacemos en la privada. Nuestro modo de trabajar siempre ha sido el mismo, intentar ofrecer al paciente la mejor atención humana acompañada de la mejor praxis médica. El problema radica en la masificación del sector público, que hace casi inviable el trato personalizado de los pacientes, la rapidez de diagnósticos y tratamientos y la accesibilidad al médico especialista.

¿Recuerdan alguna cirugía en concreto por su complejidad?
– Ya llevamos más de dieciocho años trabajando, así que tenemos muchos casos que nos han dejado huella. Por ejemplo, recuerdo un reimplante de una mano amputada de un paciente joven, una artrodesis en un pie diabético o recambios protésicos en los que prácticamente no tenemos hueso remanente al que anclar la prótesis.

¿La especialidad de Traumatología es agradecida?
– La medicina es la profesión más bonita que existe, y nuestra especialidad en concreto es agradecida porque devolvemos al paciente su autonomía a la hora de deambular o de asir objetos con las manos. La clave está en ser resolutivo y explicar al paciente de manera clara y real los objetivos que vamos a conseguir y los tiempos de recuperación con la cirugía que vamos a realizar.

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