Redacción. El consejero de Educación, Cultura y Deporte, y presidente del Patronato de la Fundación Dinópolis, Felipe Faci, ha compartido con los trabajadores de este organismo su último y espectacular hallazgo: 400 nuevas huellas de dinosaurios encontradas y documentadas en dos yacimientos de El Castellar (Teruel).
Los fósiles han sido encontrados en las excavaciones llevadas a cabo en el año 2021 por la Fundación Conjunto Paleontológico de Teruel-Dinópolis en los yacimientos de icnitas de dinosaurios El Pozo y El Hoyo en El Castellar (Teruel), declarados Bien de Interés Cultural por el Gobierno de Aragón en el año 2004.
El consejero, acompañado de la directora general de Patrimonio, Marisancho Menjón, ha podido comprobar in situ cómo se han realizado estos trabajos y ha felicitado a los investigadores por la cantidad de icnitas recuperadas. Según le ha explicado en el propio terreno el director de la Fundación, Alberto Cobos, el yacimiento El Pozo destaca por el gran número de huellas de dinosaurios saurópodos y ornitópodos (herbívoros) y terópodos (carnívoros), así como por la gran diversidad en el tamaño de las icnitas de un mismo tipo de dinosaurios productores. Por su parte, en el yacimiento El Hoyo se han excavado nuevas huellas de dinosaurios terópodos y se han realizado diversas acciones museográficas.
Faci ha querido conocer de primera mano cómo se han llevado a cabo estos trabajos, con tan excelentes resultados, y ha declarado que “aunque la sociedad esté ya acostumbrada a las investigaciones y a los datos que aporta la Fundación sobre el pasado geológico de Teruel y la huella de los dinosaurios en la provincia, hay que seguir celebrando la cantidad y la calidad de la información aportada”. En este sentido, el consejero ha destacado además el trabajo que está realizando la Fundación en un proyecto para lograr que Teruel se convierta en un centro nacional de paleontología.
Felipe Faci ha recordado que, desde 1998, cuando se puso en marcha la Fundación, se han encontrado y documentado más de 460 nuevos yacimientos paleontológicos de vertebrados en 45 municipios de la provincia de Teruel y se han recuperado más de 30.000 nuevos fósiles. Hoy en día son unos 60.000 los fósiles, principalmente de Teruel, los que componen las colecciones paleontológicas del Museo. Algunos de los más representativos se exponen en las diversas sedes de Dinópolis y otros muchos esperan a ser preparados en el laboratorio para su posterior exhibición y para que investigadores propios o de diversos países viajen hasta Teruel para su estudio.
Entre sus logros hay que destacar el descubrimiento y definición del dinosaurio más grande descrito en Europa, Turiasaurus riodevensis (Riodeva), publicado en Science, así como de otros nuevos géneros y huellas de dinosaurios descritos en las más prestigiosas revistas científicas del ámbito paleontológico. Asimismo, su labor investigadora ha permitido disponer de una de las colecciones de huesos de dinosaurios más extensas de Europa procedentes de un solo yacimiento (Ariño).
En el pasado año, además de estos nuevos descubrimientos en El Castellar, se finalizó el proyecto denominado La Carretera de las Huellas de Dinosaurio (una ruta que une municipios como El Castellar y Galve, de gran riqueza paleontológica), y tuvieron lugar las excavaciones de mamíferos cenozoicos en la Gloria 4 en la ciudad de Teruel. Asimismo, por ejemplo, se dieron a conocer investigaciones previas relacionadas con fósiles de Ariño y otras muy recientes con fósiles de Cabra de Mora, etc. También se sigue avanzando en la elaboración de un plan estratégico para la creación en Teruel de un centro nacional de I+D+i de paleontología de dinosaurios.
Además de la visita a El Castellar, Faci ha visitado previamente las instalaciones de la Fundación Dinópolis y se ha detenido tanto en las colecciones del Museo Aragonés de Paleontología como en los laboratorios en los que se desarrollan las labores de preparación, conservación y replicado de fósiles. Igualmente ha conocido el proceso de creación de esculturas de dinosaurios, entre otros trabajos paleontológicos.
La investigación de El Castellar
El yacimiento El Pozo, de unos 145 millones de años de antigüedad, era conocido anteriormente por la presencia de algunas huellas de grandes dinosaurios saurópodos –comedores de plantas con el cuello y la cola largo– y por las huellas de pequeños dinosaurios ornitópodos –también herbívoros–. En las actuaciones paleontológicas llevadas a cabo en este yacimiento en el segundo semestre del año 2021 se han excavado más de 400 nuevas icnitas. Algunas de ellas (de unos 80 cm de longitud) también fueron producidas por grandes dinosaurios saurópodos, aunque otras huellas de este mismo tipo de dinosaurios son mucho más pequeñas (algunas tienen solo unos 20 cm de longitud). Esto implica una gran diversidad de altura a la cadera de los dinosaurios saurópodos productores, con unos 3,7 metros para los más grandes y de alrededor de 0,9 metros para los pequeños (en este último caso serían saurópodos de poco más de 4 metros de longitud total).
Asimismo, la mayor parte de las nuevas huellas del yacimiento El Pozo corresponden a los pies, y también a las manos, de pequeños dinosaurios ornitópodos que tendrían unos 70 cm de altura a la cadera. Muchas de las icnitas ornitópodas se agrupan en rastros (un rastro son varios pasos consecutivos de un mismo individuo). Otro aspecto a destacar es que, junto a las icnitas ornitópodas pequeñas, también hay algunas grandes. Con estas últimas se puede inferir una altura a la cadera de unos 2 metros para los dinosaurios productores.
Según Alberto Cobos, director gerente de la Fundación Dinópolis y codirector de las excavaciones, “la presencia de dinosaurios de tamaño tan diverso en muy relevante e inusual, por lo que espera que el estudio de todos los restos hallados pueda dar luz sobre aspectos paleoecológicos como por el gregarismo o no entre individuos juveniles y adultos de un mismo tipo de dinosaurios”. Además de estas icnitas de dinosaurios herbívoros también hay otras huellas de dinosaurios carnívoros.
Según Ana González, paleontóloga de la Fundación y codirectora de las excavaciones, “todas estas nuevas huellas se sitúan en una superficie de unos 100 metros cuadrados, en unos niveles estratigráficos que tienen continuidad lateral, lo que indica el potencial del yacimiento para futuras campañas de excavación”.
Por otra parte, el yacimiento El Hoyo, de unos 127 millones de años de antigüedad, era conocido por la presencia de huellas producidas por dinosaurios terópodos. En las excavaciones se han descubierto nuevas icnitas de carnívoros, incrementándose el número de pisadas en los tres rastros más importantes del yacimiento.
Además de la excavación, la Fundación Dinópolis ha realizado diversas acciones museográficas para la visita turística en El Hoyo. En concreto, se ha señalizado el camino a pie hasta el yacimiento y se han instalado una valla y una mesa de interpretación que facilita la visión de las icnitas de dinosaurios y del entorno geológico del Cretácico. Las acciones llevadas a cabo han tenido en cuenta que El Hoyo se encuentra enclavado en un paraje privilegiado, dentro de los límites del Lugar de Importancia Comunitaria Maestrazgo y Sierra de Gúdar (Red Natura 2000).
Estas actuaciones forman parte del proyecto denominado Los yacimientos paleontológicos BIC de la provincia de Teruel como factor de desarrollo territorial (‘The Dinosaur Tracks Road’) y han sido subvencionadas por el Gobierno de España y el Gobierno de Aragón con cargo al Fondo de Inversiones de Teruel. Todas las actuaciones paleontológicas han sido autorizadas y cuentan con el apoyo del Departamento de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno de Aragón y forman parte de las acciones del Grupo de Investigación FOCONTUR.