Redacción. La Confederación Hidrográfica del Ebro (Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, MITECO) ha iniciado la fase 1 de los trabajos de adecuación morfológica y restauración ambiental del río Ebro en el paraje «El Ortigoso», en Milagro (Navarra), con un presupuesto de 1.432.467 euros. El objetivo de esta actuación es reducir los daños por inundación mediante la recuperación de espacio fluvial y la aplicación de medidas basadas en la naturaleza.
En esta zona, situada inmediatamente aguas arriba de la confluencia de los ríos Ebro y Aragón, se producen problemas en episodios de crecida, debido a la configuración morfológica de los terrenos, que dificulta que estos ríos puedan confluir conjuntamente. Cuando se producen episodios de avenida o crecida, como las recientes de diciembre de 2021 y enero de 2022, la prevalencia suele ser del río Aragón, al aportar más caudal, quedando el Ebro retenido y aumentando los desbordamientos hacia las márgenes.
Para mejorar esta situación, con los trabajos ahora iniciados, se dotará de mayor espacio al encuentro de ambos ríos, retirando 1.790 metros de la defensa de primera línea situada en la ribera derecha del Ebro y construyéndola retranqueada 100 metros hacia el interior, con una longitud de 800 metros. En el diseño de la nueva defensa se han contemplado conceptos de integración paisajística y ambiental, y será construida con taludes suaves y revegetados para evitar el efecto “barrera” y facilitar el paso de la fauna.
También se recuperarán 400 metros de un brazo del río Ebro que fue cerrado artificialmente y roturado para su transformación en una chopera productiva. Con la recuperación de este brazo, se facilitará que el Ebro y el Aragón puedan confluir de forma conjunta.
La retención que sufre el Ebro en episodios de crecida conjunta con el Aragón, ha propiciado asimismo la formación de una gran isla, inmediatamente aguas arriba de la confluencia de ambos ríos. Por eso, se ha proyectado la aplicación de la técnica del curage en esta isla, recuperando a su vez otro brazo cerrado artificialmente junto a la ribera izquierda del Ebro. El curage se basa en la recuperación de brazos obstruidos en los ríos mediante tratamientos selectivos de la vegetación y el roturado del sedimento para facilitar su movilidad y mejorar la capacidad de desagüe de los ríos.
Durante los trabajos se recuperarán 12 hectáreas de espacio fluvial, actualmente ocupado por choperas productivas y otros cultivos, y se restaurarán ambientalmente mediante la plantación de 21.000 ejemplares de plantas autóctonas.
Estrategia Ebro Resilience
La Estrategia Ebro Resilience reúne al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, a la CHE y a las Comunidades Autónomas de La Rioja, Navarra y Aragón, y tiene como objetivo llevar a cabo medidas coordinadas que fomenten la protección de los núcleos urbanos, faciliten la adaptación ante el fenómeno inevitable de la inundación y mejoren el estado de las masas de agua en el tramo medio del Ebro.
De este modo, con el objetivo de paliar los efectos de las inundaciones en la zona de confluencia de los ríos Ebro y Aragón, Ebro Resilience ha contemplado las actuaciones en “La Nava”, “El Estajao” y “La Roza”, en Alfaro (La Rioja), y en “El Ortigoso”, en Milagro (Navarra).
En 2021 concluyeron las obras en el paraje de “La Nava”, y en la actualidad se está trabajando en “El Estajao”. Asimismo, los trabajos en “La Roza” está previsto que se inicien en el verano de 2022. Y ahora, se inicia la actuación en “El Ortigoso”. Está previsto que todas estas actuaciones supongan: 7.930 metros de defensas eliminadas y sustituidas por 4.328 metros de nuevas motas retranqueadas; la recuperación de más de 85 hectáreas de hábitats fluviales de interés en una reserva natural, así como hábitats específicos para el visón europeo, y un cauce de alivio de 70.780 m2 para incrementar la superficie de paso de caudales en crecidas.