/COMUNICAE/
La cianotipia es un método de impresión fotográfica desarrollada en 1842 que aún muchas personas desconocen. Una empresa madrileña de imprenta explica cómo se realiza este proceso interesante
La cianotipia es un proceso fundado en el 1842 por sir John Herschel con la finalidad de reproducir documentos musicales, es decir, notas y diagramas, pero cuyo método también fue adoptado más tarde, por la arquitectura. Un poco más tarde, Anna Atkins le dio un uso más artístico a la cianotipia, mezclando la botánica con la fotografía y creando un libro de cianotipos de algas y construyendo lo que sería el primer libro de fotografías de la historia. Imprimir cianotipos es un proceso muy creativo y gratificante, además es una técnica que se puede hacer incluso en casa. Por este motivo, Imprenta Madrid, una empresa de impresión madrileña con una vasta experiencia en el mundo de la imprenta, explica este proceso tan interesante.
“Para efectuar impresiones de cianotipia se necesitarán dos productos químicos llamados citrato de amonio férrico verde y ferricianuro de potasio rojo, agua, una báscula, un cilindro graduado, papel en el formato que deseemos, dos frascos para medir, una palangana, un pincel y una esponja y una placa de cristal con el mismo tamaño que la hoja en la que se va a imprimir. Aunque los productos químicos no son realmente peligrosos para la salud, es importante tener un poco de precaución y no inhalar o ingerir estos líquidos” explica imprenta Madrid.
El primer paso, según esta empresa profesional de impresión, será mezclar el citrato de amonio con el agua y dejar que estas reaccionen al menos 24h en un lugar oscuro y seco. Aunque lo mejor es utilizar esta mezcla tan solo unas semanas, esta substancia se puede utilizar hasta 6 meses después de mezclarla. El segundo paso será la emulsión. Después de dejar que la solución repose ha llegado el momento de mezclar ambas soluciones y esto se tiene que realizar en un lugar oscuro y seco, donde los rayos del sol no penetren. Cuando ambas soluciones estén mezclaras se deben utilizar lo antes posible, puesto que, a medida que pasa el tiempo, va perdiendo fuerza.
El siguiente paso será verter la mezcla en una bandeja y distribuirla con un cepillo en el papel. El proceso es similar a cuando se desea pintar una pared y se puede realizar tanto con un cepillo como con un rodillo. El último paso es el más importante de todos. Tras dejar que la hoja se seque en la oscuridad, es el momento de colocar la hoja emulsionada al sol, con los objetos que se desean imprimir (flores u hojas, por ejemplo) y la placa de cristal cubriendo todo. A los 20 minutos ya se podrán observar los resultados, aunque probablemente ya se podrán ver cambios mucho antes. El revelado y el secado son las últimas fases y se realiza con agua. El resultado será una bonita hoja azul con hojas o flores impresas.
Fuente Comunicae