Redacción. Como en estos últimos años, la primavera viene de la mano de una celebración a nivel mundial. Se trata del Día Internacional de la Astronomía. Esta iniciativa fue propuesta en el año 1973 por el presidente de la Asociación Astronómica de California del Norte, Doug Berger.
El objetivo principal de este día es el de acercar la Astronomía a todo el mundo, inundando las ciudades de telescopios y motivando a los niños y a los jóvenes a interesarse por esta ciencia. El lema de esta celebración es “un pueblo, un cielo” difundido por la Organización Astrónomos sin Fronteras www.astronomerswithoutborders.org
El Día Internacional de la Astronomía se celebra dos veces al año: en primavera y en otoño. El primer evento se lleva a cabo entre mediados de abril y mediados de mayo, durante el sábado más cercano a la primera luna en cuarto creciente. Por su parte, la celebración otoñal tiene lugar en el sábado más próximo al cuarto creciente lunar entre mitad de septiembre y mitad de octubre. En esos dos días, las asociaciones y organismos astronómicos organizan charlas de divulgación y observaciones astronómicas. Durante la noche, muchos observatorios dirigen sus telescopios hacia la Luna para que la gente pueda observar nuestro satélite natural.
La Universidad de Zaragoza se une a este evento mañana sábado, 7 de mayo de 2022, a partir de las 21.30 horas, mediante una observación lunar que se realizará desde el Campus San Francisco, gracias a varios telescopios que se instalarán en la entrada del edificio de Físicas de la Facultad de Ciencias.
Esta es una de las actividades que ha programado el Instituto Universitario de Matemáticas y Aplicaciones (IUMA) de la Universidad de Zaragoza, el Área de Astronomía y Astrofísica del Departamento de Física Teórica de la Facultad de Ciencias y la Agrupación Astronómica de Huesca, y que cuenta con la colaboración de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Zaragoza.
Con esta actividad se pretende invitar a los que lo deseen a contemplar por telescopio la Luna en cuarto creciente. En esta fase, la Luna es visible por la tarde y durante la noche. Esto facilita su observación para la mayoría de la gente. Además, las sombras que proyectan sus cráteres y montañas son adecuadas para disfrutar de la superficie lunar, tal como explican dos de sus organizadores, Luis Rández, catedrático de Matemática Aplicada, y Manuel Membrado, profesor titular de Astronomía y Astrofísica.
Se seguirá en todo momento el protocolo Covid para realizar observaciones astronómicas seguras.