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Según el FMI, dos tercios de los niños y niñas se dedicarán a profesiones que hoy no existen. ¿Cómo podrán los niños superar los desafíos de la década de 2050? Identificar problemas complejos, tomar decisiones inteligentes en base a la autoconciencia y autoeficacia, colaborar bajo incertidumbre y ser dueño de sus resultados son, según NXTLVL.io algunas de las habilidades críticas necesarias para convertirse en grandes profesionales del futuro
El frenético desarrollo de la tecnología está cambiando radicalmente los paradigmas sociales y económicos en todo el mundo. Si hace unos años era impensable que la tecnología estuviera tan arraigada en todos los aspectos de la vida, hoy todas sus herramientas y aplicaciones son indispensables y se encuentran totalmente integradas en las formas de trabajar, comunicar, sentir y comportar.
Si la gestión de estos cambios es un tema crítico y un desafío en sí mismo, esto cobra aún más importancia cuando se habla del futuro de los hijos. Según el Fondo Monetario Internacional, dos tercios de los niños de hoy se dedicarán a profesiones que aún no existen. Entonces, ¿cómo podrán los niños superar los desafíos de la década de 2050 con enfoques educativos de mediados del siglo pasado?
Para NXTLVL.io, el innovador y complejo programa extracurricular de aprendizaje basado en juegos, la tecnología se puede aprovechar para ayudar a los niños a desarrollar habilidades clave (adentrarse en problemas complejos, tomar decisiones inteligentes, colaborar en situaciones de incertidumbre, ser dueños de los resultados) dentro de grupos de compañeros con su misma mentalidad. Su fundador y CEO, Konstantinos Papazafeiropoulos, basándose en investigaciones sobre educación infantil y juegos de aprendizaje -y contando con la ayuda del equipo de NXTLVL, formado en las mejores universidades del mundo (MIT, Harvard y UCL)-, desentraña cuáles son las habilidades más importantes por el futuro de los hijos e hijas:
– Adentrarse en problemas complejos: esta habilidad se refiere más al proceso que a la solución particular. Los niños pueden identificar el problema y desglosarlo en sus parámetros clave para comprenderlo en términos generales, utilizando el pensamiento de principios básicos. Una vez que se identifica un resultado deseado, consideran sus experiencias previas y piensan de manera crítica y creativa antes de implementar un plan.
– Tomar decisiones inteligentes: la toma inteligente de decisiones implica, en primer lugar, la autoconciencia y la autoeficacia en el proceso de pensamiento, y la capacidad de llegar a una decisión bien fundamentada. Solo entonces los niños pueden aplicar una comprensión sólida de los diferentes modelos mentales, así como una comprensión de orden superior de cuándo, cómo y por qué usar modelos mentales particulares. Los niños aprenden cómo pensar, no qué pensar. El pensamiento crítico es clave, al igual que la capacidad de reflexionar sobre la decisión y utilizar esta información para promover su aprendizaje.
– Colaborar bajo la incertidumbre: la incertidumbre puede ser incómoda, pero es un hecho inevitable de la vida que muchas veces puede ser positiva. Aprender a hacer frente a la incertidumbre requiere coraje, así como la resiliencia para mantener una perspectiva curiosa. Esta faceta de la condición humana está entrelazada con el hecho de que son seres sociales por naturaleza. Aprovechar el valor de construir relaciones y reconocer el valor agregado de amigos o familiares para lograr un objetivo común requiere desarrollar una variedad de habilidades sociales y emocionales, que incluyen comunicación, liderazgo, colaboración y autoconciencia, así como una comprensión profunda de cómo utilizar estas habilidades y modelos mentales productiva y éticamente, para prosperar.
– Ser dueño de los resultados: esta habilidad es multifacética ya que para que un niño sea dueño del resultado de sus acciones, también necesita ser dueño del proceso. Implica creer en uno mismo, así como la capacidad de reflexionar, aprender y crecer: reconocer, comprender y aceptar tanto los éxitos como los fracasos. Los niños aprenden a ser dueños de sus resultados identificando una meta, planificándola en base a habilidades y modelos mentales, implementando y adaptando este plan y, finalmente, evaluando si el resultado cumple con sus expectativas. La resiliencia surge del entendimiento de que cada resultado es una oportunidad única para aprender del proceso.
Con el propósito de convertir a los niños y niñas del presente en profesionales exitosos del futuro nace NTXLVL.io. Su fundador y director general, Konstantinos Papazafeiropoulos, afirma que más allá de los conocimientos que brindan las escuelas, «lo que realmente necesitan desarrollar los niños es confianza en sí mismos y autoeficacia para poder elegir el futuro que les satisfaga y les haga prosperar».
El equipo de NXTLVL ha creado un programa innovador de aprendizaje online a través de tres principios básicos: juegos estimulantes, facilitación dirigida y colaboración activa. Durante una hora a la semana, los alumnos se sumergen en juegos educativos que imitan entornos complejos y situaciones nuevas que, con seguridad, experimentarán en la vida real. Sin conocer las reglas de los juegos, los niños hacen suposiciones y prueban, fallan y corrigen hasta que encuentran las estrategias más efectivas. Los niños y niñas se vuelven curiosos, se emocionan y se motivan: quieren aprender porque es divertido.
Los niños y niñas siempre lideran la sesión, pero junto a ellos están los facilitadores expertos de NXTLVL.io que coordinan las sesiones de manera personalizada, dándoles la oportunidad de descubrir, practicar y desarrollar activamente sus habilidades a través de preguntas abiertas y observaciones. De esta manera, los niños tienen el control de su aprendizaje y de sus propias metas y resultados.
Fuente Comunicae