Redacción. El presidente de Aragón, Javier Lambán, ha trasladado a su Santidad el Papa Francisco la importancia histórica del Reino de Aragón y ha solicitado la rehabilitación con todos los honores de don Pedro Martínez de Luna y Pérez de Gotor, el Papa Luna, para que deje de ser considerado antipapa o el pontífice del cisma de Occidente.
Lambán ha aprovechado la recepción para invitar al Papa Francisco a visitar nuestra comunidad autónoma. Ha invitado al Papa a visitar Aragón, Zaragoza y San Juan De la Peña, en nombre de Félix Longás, hermano mayor de Real Hemandad de San Juan de la Peña. El presidente ha recordado que Juan Pablo II estuvo en Zaragoza en dos ocasiones.
Estos tres sido tres de los principales puntos tratados en la audiencia privada que ha tenido lugar en Roma del Papa Francisco al presidente, Javier Lambán, la primera a un presidente de Aragón, y al Arzobispo de Zaragoza, Carlos Escribano. El encuentro se ha prolongado durante 30 minutos.
Tras la reunión, el presidente aragonés ha recordado que cerca de cumplirse los 600 años de su fallecimiento en Peñíscola parece una ocasión oportuna para reivindicar su figura, » y más teniendo en cuenta de que este asunto fue planteado por todos los obispos de Aragón ante la Congregación para la Doctrina de la Fe sobre la reivindicación de la figura del Papa Luna, Benedicto XIII, natural de la localidad aragonesa de Illueca.
El presidente Javier Lambán también ha recordado la vinculación histórica de Aragón con la autoridad pontificia. En este sentido ha evocado el simbólico hecho de que, en el noningentésimo quincuagésimo aniversario del cambio del cambio de rito hispánico o mozárabe por el rito romano, que tuvo lugar el 22 de marzo de 1071 en el monasterio de San Juan De la Peña, en el que a la hora sexta se cantó la primera misa romana en presencia del cardenal Hugo Cándido y del rey Sancho Ramírez. Ese fue el punto de partida y por su extensión, a lo largo de los siglos en toda la península ibérica.
Lambán también ha hecho referencia a la celebración de un oficio religioso este año, coincidiendo con la conmemoración de estos 950 años la Hermandad de San Juan de la Peña, en la iglesia del antiguo monasterio para celebrar ese nexo histórico con la autoridad Vaticano. Además, le ha recordado al Papa la vinculación secular de San Juan de la Peña con la fe católica, ya que se custodió el Santo Grial, en su recorrido a través del tiempo hasta la catedral de Valencia.
El presidente aragonés también ha significado la vinculación de las tradiciones y costumbres de Aragón con la Santa Sede ya que desde la lejana fecha de 14 de febrero de 1068 cuando el rey Sancho Ramírez visitó Roma para agradecer al entonces Papa Alejandro II la consolidación del entonces joven Reino de Aragón. De esta visita nuestra heráldica propia conserva la seña que nos identifica con los colores gules sobre oro que conforman la bandera aragonesa puesto que según consta en las bulas papales en referencia a la tradición de San Pedro iban con hilos dorados y rojos.
Mancusos de Sancho Ramírez y medida del Pilar
El presidente Lambán ha entregado a su Santidad el Papa Francisco dos mancusos de oro y una medida de la Virgen del Pilar. Ha entregado los mancusos como testimonio de los vínculos históricos de Aragón y Roma recordando el compromiso del rey Sancho Ramírez ocurrido en la cuaresma de 1068 «en el mes de febrero el día 17, antes de las calendas de marzo», en el que se resolvió tributar al Papa cada año de su vida.
«Uidelicet quingentos mancusos Iaccensis monete pro remeció anime mea». Los mancusos fueron acuñados en Jaca en 1089. Estas dos monedas son las primeras de una serie única de siete del mismo tamaño, peso y aleación del mancuso aragonés de Sancho Ramírez.
En el documento entregado que acompaña a las monedas se recuerda que pocos territorios tienen tanta vinculación histórica como Aragón y Roma desde la ya lejana fecha de 14 de febrero de 1068 cuando el rey Sancho Ramírez visitó por primera vez al Papa y de esta visita nuestra heráldica propia conserva la seña que nos identifica con los gules sobre oro que conforman la bandera aragonesa. «La actuación de Sancho Ramírez estuvo siempre condicionada por su relación y sus compromisos con la Santa Sede», añade.
Además, el presidente ha entregado una medida de la virgen del Pilar. En el texto que acompaña a la medida se recuerda que la primera data de 1621 y que las cintas nacieron para sustituir a los mantos de la virgen que eran solicitados de manera masiva por enfermos de toda España para cubrirlos con ellos y ayudarles durante su enfermedad, de forma que se popularizó. Hoy la virgen del pilar es un símbolo aragonés universal.