Redacción.- El Gobierno de Aragón va a adaptar las bases de las recientes becas salario y colaborará más estrechamente con la Universidad de Zaragoza para tratar de llegar a un mayor número de beneficiarios, apoyar el talento de los jóvenes brillantes que provienen de entornos más desfavorecidos y garantizar así la igualdad de oportunidades.
Tras la experiencia de las dos primeras convocatorias, se elaborará un convenio con el campus público para poder informar directa y personalmente a los posibles beneficiarios de la existencia de estas ayudas. Y adicionalmente se flexibilizará la nota mínima exigida de acceso a la universidad. Para el próximo curso será de 8,75, en vez del 9 que se solicitaba hasta el momento.
De acuerdo a los datos del Ministerio de Educación y de la propia Universidad, se estima que en torno a 70 jóvenes, que se matriculan por primera vez en un grado en Aragón, cumplen anualmente los requisitos establecidos en el programa: tener un expediente brillante y ser beneficiarios el curso anterior de una beca del Ministerio de Educación para estudios postobligatorios, en el componente de la cuantía fija ligada a la renta del estudiante.
“Sabemos que el talento está ahí y hemos de salir a buscarlo más directamente, a la vista de los resultados de las dos primeras convocatorias, en las que pese a haber recibido más de 150 solicitudes, finalmente han podido acceder al programa 26 jóvenes, ya que el resto no cumplía alguno de los requisitos”, ha explicado la directora general de Universidades, Yolanda Sancho.
Después de redoblar este curso la información en los institutos de Educación Secundaria de toda la Comunidad con la implicación de los servicios de Orientación, se busca ahora dar un paso más allá y acceder directamente a los potenciales beneficiarios en el momento de la matriculación, con la colaboración de la Universidad.
De esta forma, mediante una cesión de datos, la Administración podrá comunicarse directamente con los jóvenes que reúnan las dos condiciones básicas que requieren estas becas, algo que hasta ahora no era posible ya que esos datos no obran en poder del Ejecutivo autonómico.
Además, y después de un análisis exhaustivo de los casos que se han desestimado estos dos años, se flexibilizará mínimamente la nota de corte, para que el estudiantado pueda recibir las ayudas a partir del 8,75 y no del 9, como hasta ahora.
“Creemos en esta nueva línea de subvenciones que apuesta por el futuro y va encaminada a apoyar a nuestros jóvenes más brillantes pero que lo tienen más difícil en otros aspectos. Gracias a este programa, hemos logrado que 26 estudiantes con un currículum brillante puedan centrarse en seguir siendo excelentes sin preocuparse por llegar a fin de mes, y ahora vamos a adaptarlo para que pueda cumplir mejor los fines con los que nació y consigamos ayudar a más jóvenes”, ha explicado la directora general de Universidades, Yolanda Sancho.
Esta línea de ayudas, que se puso en marcha el curso pasado, persigue fomentar la dedicación exclusiva al estudio de jóvenes con alto rendimiento académico al compensar los ingresos que recibirían si accedieran el mercado laboral. Está ligada al cumplimiento de unos estándares de rendimiento académico, en función de las distintas ramas de conocimiento.
Los estudiantes perciben una beca de 9.500 euros anuales, a razón de 950 euros al mes, durante los diez meses que dura el curso universitario. Se cobra en dos pagos parciales, y son las becas para estudios universitarios mejor dotadas de toda España.