Redacción.- El Ayuntamiento de Zaragoza ha comenzado a instalar en el entorno de la calle Doctor Cerrada la nueva red de videovigilancia que utilizará inteligencia artificial para mejorar la seguridad ciudadana.
El sistema, autorizado por la Comisión de Garantías de Videovigilancia, permite el monitoreo de imágenes en tiempo real y a posteriori e incorpora sistemas de búsqueda inteligentes para analizar en muy poco tiempo enormes cantidades de información, visualizando las imágenes con gran calidad de detalle.
También se ha instalado ya el centro de control donde se van a registrar las grabaciones. Ubicado en el cuartel de la Policía Local de Domingo Miral, el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón y la concejala delegada de la Policía Local, Patricia Cavero han visitado hoy las instalaciones para conocer las primeras pruebas del sistema que se están realizando.
Los datos que captan las cámaras sobre el movimiento de objetos, personas y vehículos permitirán la detección de comportamientos sospechosos que puedan implicar riesgos para la seguridad y ayudarán en las investigaciones a petición de la policía judicial o por orden judicial.
Esta información estará anonimizada para garantizar el derecho a la privacidad. No captarán tampoco imágenes ni sonidos del interior de las viviendas ni de los vestíbulos de edificios ni podrán servir para el reconocimiento facial, tal y como establece la normativa en materia de protección de datos personales.
La red está compuesta por 14 cámaras que funcionarán las 24 horas del día y que pueden captar imagen en condiciones adversas de luminosidad. Las tres primeras se han colocado ya en la calle Princesa y en la calle Cortes de Aragón. Habrá además dispositivos en la calle Doctor Cerrada con Ricla, con Dato y con Fita, en Gran Vía esquina con la calle Dato y en la calle Ricla.
Con una inversión de 174.652 euros, además de la identificación de personas en el marco de investigaciones policiales y judiciales, esta red de videovigilancia pretende tener también un efecto disuasorio.
La Policía Local se encargará de supervisar el sistema y custodiar las grabaciones durante un periodo de 30 días, que es el tiempo legal máximo que se pueden almacenar las imágenes.
El sistema está preparado para soportar y gestionar gran cantidad de información en alta resolución enviada de forma simultánea ya que las cámaras ofrecerán información de forma continua.
La nueva red estará operativa finales de mayo y supone un salto cualitativo en los sistemas de videovigilancia instalados hasta ahora en Zaragoza; sistemas que el equipo de gobierno PP-Cs ha impulsado a lo largo de esta legislatura con la instalación de 12 cámaras en varias calles del Casco Histórico y otras 2 que se pondrán en funcionamiento próximamente en la calle Antonio Leyva del barrio Oliver.