/COMUNICAE/
La Fundación ha organizado la jornada ‘El derecho a la formación para el trabajo’, enfocándose en la necesidad de garantizar una formación profesional accesible y eficaz para todos los trabajadores en España
La Fundación para la Calidad e Innovación de la Formación y el Empleo (CIFE) ha organizado esta mañana en Madrid la jornada ‘El derecho a la formación para el trabajo’, con el objetivo de analizar y debatir los elementos fundamentales que garanticen el derecho a una formación profesional eficaz y accesible para todos los trabajadores en España.
Durante la jornada se abordaron temas clave como el derecho a la formación profesional, el rol de los actores en la formación, la garantía del derecho a la formación y el diálogo social a través de conferencias y mesas redondas, proporcionando una plataforma de debate y colaboración entre los diferentes ponentes para mejorar el sistema de formación profesional en España.
Tras la recepción por parte de Javier Cantera, presidente de la Fundación Personas y Empresas y presidente de AUREN Consultoría, Valeriano Gómez, presidente de la Fundación CIFE, ha observado cómo en los últimos años, la Fundación CIFE ha enfocado sus esfuerzos en analizar y mejorar el sistema de formación profesional en España, destacando avances en la gestión y la necesidad de abordar problemas persistentes. En su ponencia «El derecho a la formación para el trabajo. Una propuesta estratégica», ha subrayado la importancia de la participación de los interlocutores sociales y el uso efectivo de los fondos disponibles. Gómez ha traído a la palestra la experiencia del modelo danés, que se presenta como un referente en la formación de oferta, que debe complementar la formación de demanda y ha identificado cuatro factores clave para mejorar: «recursos financieros, adecuación de infraestructuras, accesibilidad de oportunidades formativas y duración de la formación». Finalmente, ha abogado por mejorar la concertación con proveedores privados y explorar contratos programa para necesidades de formación significativas, con el objetivo de desarrollar propuestas que avancen en los derechos de formación en el país.
En su intervención en la mesa redonda sobre «La garantía del derecho a la formación«, Mikel Torres, vicelehendakari segundo y consejero de Economía, Trabajo y Empleo del Gobierno Vasco, ha planteado una serie de preguntas sobre las barreras que impiden el acceso a la formación y posibles soluciones, destacando la falta de una oferta permanente de formación y ha señalado que, a pesar de los recursos económicos invertidos, hay problemas para que las personas se mantengan en sus empresas, lo que hace que la inversión en formación no siempre tenga resultados. Torres ha subrayado la importancia de alinear las competencias de las personas con las necesidades de las empresas, enfatizando que el análisis de las barreras debe ser individualizado, así como la necesidad de facilitar el «reskilling» y el «upskilling» para adaptar las competencias a las demandas del mercado laboral.
En esta mesa redonda, moderada por Juan M.ª Menéndez-Valdés, Gerardo Gutiérrez Ardoy, director general del SEPE, se ha centrado en la necesidad de mejorar el acceso a la formación para combatir la desigualdad y en la importancia de la colaboración público-privada como un modelo eficaz, así como la necesidad de utilizar los fondos disponibles para fortalecer el servicio de orientación profesional, un servicio crucial para guiar a los trabajadores y empresas en la adquisición de competencias. Gutiérrez también ha señalado la fragilidad de los servicios de orientación en comparación con otros países europeos y la importancia de capacitar a los gestores y administradores de las pequeñas y medianas empresas para que puedan asesorar sobre formación y herramientas tecnológicas necesarias.
Por su parte, Antonio De Luis Acevedo, director gerente de FUNDAE, ha abordado la necesidad de mejorar el acceso a la formación en las pequeñas y medianas empresas, destacando que estas a menudo carecen de un diagnóstico adecuado de sus necesidades formativas y ha destacado que, aunque las pequeñas empresas gastan más en formación en proporción, se financian menos que las grandes, por lo que es crucial analizar cuánto invierten de su propio bolsillo y qué estrategias están funcionando. Además, puesto el foco en la urgencia de integrar a 24.600.000 inmigrantes en el mercado laboral español, lo que requiere una respuesta rápida y coordinada. Por último, Ángel Gallego, miembro del Patronato de la Fundación CIFE, ha puesto de relieve que la coordinación entre comunidades autónomas, servicios públicos de empleo y el Ministerio de Educación es crucial para ofrecer una oferta formativa coherente y accesible y ha explicado que cada fuente de financiación genera diferentes modelos de formación y condiciones de acceso, lo que puede resultar confuso para los usuarios. La orientación se convierte, para Gallego, en un elemento fundamental para ayudar a los alumnos a elegir adecuadamente.
El papel del diálogo social ha sido explorado a fondo en la segunda mesa redonda del día, titulada «El diálogo social en la consolidación del derecho a la formación» en la que Sebastián Pacheco Cortés, secretario Confederal de Formación de UGT, ha destacado la importancia de la formación continua a lo largo de la vida, tanto en el ámbito laboral como personal, subrayando que las competencias digitales son esenciales y proponiendo regular el derecho a la formación y establecer la necesidad de un pacto nacional por la formación en el trabajo. Pacheco ha señalado que la falta de ejecución de fondos destinados a la formación es un problema grave, especialmente en comunidades como Extremadura y ha abogado por la creación de una Agencia Nacional de Formación Profesional para unificar la gestión de estos fondos y garantizar la igualdad de acceso a la formación en todo el país. Por su parte, José Miguel Guerrero, presidente de la Comisión de Formación de la CEOE, ha hecho hincapié en la importancia del diálogo social en la consolidación del derecho a la formación, diferenciando entre educación y formación. Mientras que el derecho a la educación es fundamental, el derecho a la formación, aunque relevante, es menos prioritario en la Constitución. Igualmente, ha destacado que la formación debe adaptarse a las necesidades del mercado laboral y que todos los actores, incluidas empresas y administraciones, tienen responsabilidades.
Miguel Canales Gutiérrez, responsable de Formación y Riesgos Laborales de CEPYME, ha señalado la importancia de la formación en el desarrollo económico y social y mencionando el papel de las Naciones Unidas y su recomendación sobre el aprendizaje de calidad, que busca ayudar a los países en desarrollo a establecer marcos adecuados para la formación. Canales ha destacado tres indicadores clave para el desarrollo: la esperanza de vida, el ingreso per cápita y el acceso a la educación, poniendo de relieve que la normativa española sobre el derecho a la formación está bien regulada, mencionando la Constitución y el Estatuto de los Trabajadores.
Y, por último, ha cerrado esta mesa moderada por Maru Menéndez, Francisco Moreno, adjunto confederal de Formación en la Secretaría de Internacional, Cooperación y Migraciones del Departamento de Formación de CC. OO., ha criticado que la Ley 30/2015, aunque ha tenido beneficios, ha desviado la gobernanza hacia los centros privados de formación, dejando a los públicos en un segundo plano lo que ha generado un desajuste entre la oferta y la demanda de formación, ya que las necesidades del mercado laboral no están siendo atendidas adecuadamente. Entre los retos que enfrenta la formación, ha menciona la necesidad de cualificación ante las transformaciones del sistema productivo, destacando la importancia de hacerlo desde principios de justicia, igualdad y sostenibilidad. Moreno ha llamado a una autocrítica en el ámbito de la negociación colectiva, señalando que ha habido un empobrecimiento en la inclusión de temas de formación y ha destacado la necesidad de que las organizaciones sindicales y empresariales trabajen juntas para fortalecer este aspecto y asegurar que la formación se convierta en un eje central en las negociaciones. Por ello, Moreno propone la creación de un marco común y un observatorio que integre las necesidades del sistema productivo, lo que permitiría una mejor coordinación y una toma de decisiones más informada en materia de formación.
Para concluir el evento, Juan Chozas, patrono de la Fundación Personas y empresas, ha destacado el consenso sobre los retos del sistema de formación, mencionando la complejidad en su gestión, que involucra a múltiples actores y administraciones, así como la dificultad para que las PYMES se beneficien de la formación y la necesidad de una colaboración público-privada más efectiva. Chozas ha subrayado la importancia de realizar diagnósticos previos antes de implementar acciones de formación y garantizar la igualdad de acceso y ha abogado por aprovechar la tecnología para facilitar el acceso a la formación y critica la falta de integración del sistema, lo que dificulta llegar a las pymes.
La jornada recibió una excelente acogida desde su anuncio, reflejando la creciente conciencia sobre la importancia del derecho a la formación para la competitividad y el desarrollo laboral. En un mundo donde la empleabilidad depende cada vez más de la actualización continua de habilidades y conocimientos, eventos como este se vuelven vitales para asegurar que todos los trabajadores tengan la capacidad de acceder a la formación necesaria para adaptarse y prosperar en sus carreras.
La Fundación CIFE, como entidad organizadora, reafirma su compromiso con la promoción de la calidad y la innovación en la formación y el empleo, convirtiéndose en un punto de referencia para el impulso de políticas formativas efectivas y alineadas con las necesidades reales del mercado laboral. Con estas iniciativas, se pretende no solo dar respuesta a las demandas actuales, sino también anticiparse a los retos futuros que plantea la evolución constante del panorama laboral.
Fuente Comunicae