Redacción. El Ayuntamiento de Zaragoza instalará en el entorno de la calle Doctor Cerrada una red de videovigilancia que utilizará inteligencia artificial para mejorar la seguridad. Se trata de un proyecto piloto que posteriormente se ampliará a otras zonas de la ciudad.
Este sistema de cámaras de visión artificial permitirá detectar comportamientos sospechosos a partir de los datos que capten del movimiento de objetos, personas o vehículos; datos que estarán anonimizados para garantizar el respeto a la privacidad.
La concejala delegada de Policía Local, Patricia Cavero ha explicado que ‘se trata de aprovechar las posibilidades que ofrece la tecnología, y en concreto la inteligencia artificial, para facilitar el trabajo de los agentes. Es una potente herramienta que permitirá a los policías cruzar grandes cantidades de datos y con ello agilizar rastreos y posteriores identificaciones’.
Esas búsquedas inteligentes ofrecen la posibilidad de analizar en muy poco tiempo gran cantidad de información y detectar vehículos o personas a partir de datos como la marca y el color, el tipo de ropa o el género. Sin embargo, no pueden servir para el reconocimiento facial, tal y como establece la normativa en materia de protección de datos personales, su visionado está restringido y sometido a controles de seguridad.
Este sistema, igual que cualquier cámara colocada en la vía pública, requerirá la autorización de la comisión de garantías de videovigilancia, dependiente de la Delegación del Gobierno. Cavero ha explicado que el proyecto piloto se va a implantar en las calles Dato, Princesa, Fita, Ricla y parte de Cortes de Aragón y la propia Doctor Cerrada. Las cámaras se instalarán en puntos estratégicos. Para definir la ubicación exacta y la tecnología más adecuada el Ayuntamiento de Zaragoza ha sacado a licitación la redacción del proyecto técnico. En él se concretarán los equipos a instalar, toda la infraestructura de grabación y almacenamiento de datos necesaria, la conectividad o el software para su gestión.
El proyecto cuenta con un presupuesto de 240.000 euros y la previsión es que, una vez definidas todas las cuestiones técnicas, la implantación del sistema se pueda licitar antes de que acabe el año.
Esta red supone un salto cualitativo en los sistemas de videovigilancia instalados hasta ahora en Zaragoza; sistemas que el equipo de gobierno PP-Cs ha impulsado a lo largo de esta legislatura con la instalación de cámaras en varias calles del Casco Histórico y las que próximamente se colocarán en Oliver.