Redacción. La Fundación Ecología y Desarrollo (ECODES) ha puesto en marcha hoy día 22 de diciembre una iniciativa para favorecer un cambio en el consumo eléctrico. La campaña ‘Ni un hogar sin Energía’ tiene como objetivo contribuir a paliar la pobreza energética en Aragón demostrando cómo un cambio de hábitos en el consumo de energía y medidas de eficiencia energética sencillas pueden reducir las facturas y las emisiones de CO2.
Según informa esta organización la pobreza energética en Aragón alcanzó en 2012 el 19% de la población, y se estima que actualmente estemos por encima del 20%. El deseo de frenar esta cifra y disminuirla ha sido la causa por la que se ha lanzado esta campaña por segunda vez.
En la primera edición del proyecto en 2013 participaron 15 familias de los barrios de San Pablo y la Magdalena consiguiendo una reducción media del 35 % en sus facturas energéticas, además de una mejora en las condiciones de temperatura y humedad de las viviendas repercutiendo en la mejora de la salud de sus habitantes.
El éxito del proyecto ha hecho que el Ayuntamiento de Zaragoza haya duplicado la financiación para esta segunda edición. Además, otras entidades y empresas se han ido sumando al proyecto consiguiendo que en 2014 el proyecto pueda llegar hasta 40 familias y nuevos barrios como Actur y Delicias. Ente los colaboradores se encuentran Fundación Bancaria “la Caixa” a través de su Obra Social, que aporta fondos para el desarrollo del proyecto, Balay Electrodomésticos y Clover LED que aportan equipos para mejorar la eficiencia energética de los hogares, Efinetika que apoya expertos en auditorías energéticas y Cruz Roja que aporta voluntarios para apoyar a ECODES en el trabajo de campo con las familias.
Las lecciones aprendidas permitirán iniciar el desarrollo una serie de herramientas y recursos para que el proyecto pueda ser replicado fácilmente por entidades sociales de diferentes ciudades que trabajan con colectivos en situación de pobreza energética.
El proyecto es una muestra de que, en tiempos de crisis económica, social y ambiental, el trabajo en red de diferentes entidades y empresas permite impulsar iniciativas innovadoras que logran hacer frente a la pobreza energética uno de los problemas que acucia cada vez a un mayor número de familias españolas.