Nerea Beatove. Creativos, imaginativos, jóvenes y emprendedores. Los zaragozanos Pedro Lozano y Héctor Paz son los responsables de una de las empresas más innovadoras del año: Imascono.
Lo que comenzó como dos proyectos individuales con proyección de futuro, ha conseguido fusionarse para crear moda urbana tecnológica y convertirse en un referente en el sector de la realidad aumentada. Una realidad en la que la ropa es mucho más que eso. Se trata de una experiencia en la que gracias a la interacción mediante smarphones y tablets, el textil deja de ser inerte y cobra vida a través de la pantalla. Ejemplo de ello es su colección Alive Animals con En Clave de China, donde el usuario puede transformarse en uno de los animales del zodiaco chino visto desde un dispositivo móvil.
El cartel de las Fiestas del Pilar, la película REC4, las botellas de vino de Grandes Vinos y Viñedos, o las camisetas del Campeón de Europa Javi Martinez son algunos de sus proyectos clave.
Pero eso no es todo porque Imascono ha querido ampliar sus horizontes a otro tipo de público: el infantil. Gracias a su nueva aplicación educativa Chromville, los pequeños pueden crear sus propias animaciones 3D, viendo como sus dibujos se elevan del papel para convertirse en realidad.
Hasta ahora, sus grandes ideas y ambiciosos proyectos les han permitido cosechar numerosos premios. Entre ellos el premio Aragón en la Red a ‘La Mejor Aplicación Móvil’ de Telefónica, el premio ‘IDEA’ CeeiAragon en ‘Categoría producto’ y el recientemente galardón del Instituto Aragonés de la Juventud al Proyecto Joven.
Entrevistamos a Pedro Lozano, fundador de Imascono que nos cuenta cuáles son sus próximos retos y como ha ido evolucionando su idea de negocio desde los inicios hasta la actualidad.
-Después de ocho colecciones, habéis conseguido revolucionar la moda urbana con vuestros diseños de camisetas con realidad aumentada. ¿Cómo surge esta idea?
-Surge de pura casualidad, por iniciativa, por las ganas de emprender y gracias a una pizca de suerte. Aunque la suerte, también hay que buscarla. Inicié el proyecto con la marca de ropa cotidiana en 2008 mientras estudiaba segundo de Diseño de Interiores. Siempre he sido una persona con iniciativa muy emprendedora y con ganas de hacer lo que me gusta y en el soporte textil veía una idea que podía ser interesante. Entonces lancé la primera colección de la marca Imascono. La cosa fue gustando, fue cogiendo forma y dos años después me planteé abrir una página web para tener una plataforma de venta online. A través de un amigo me puse en contacto con el que es mi socio actual, Héctor Paz, que recientemente había ganado el concurso del cartel de las fiestas del pilar. Él es ingeniero y había realizado un proyecto relacionado con la realidad aumentada y de la conexión surge la idea de unificar ambos proyectos personales.
-Cómo en todos los negocios hubo un primer paso, que a menudo, suele ser el más complicado ¿Os resultó difícil poner en marcha el proyecto?
-La verdad es que no. Al principio yo empecé en plan amateur, pero cuando conocí a Héctor y nos enteramos que el semillero de ideas estaba ayudando a formar a nivel empresarial, nos presentamos y nos seleccionaron. Él viene del mundo de la ingeniería, yo del mundo del diseño y a nivel de empresa no teníamos ningún conocimiento. Por eso para nosotros fue clave entrar en este programa. Todo el equipo de Zaragoza Activa la verdad que a nivel humano es estupendo, se involucran mucho con todos los proyectos y siempre que hemos necesitado ayuda o desinteresadamente han podido aportar algo siempre han puesto su granito de arena.
-¿Actualmente tenéis el estudio allí?
-Sí, de momento aún tenemos estancia y hasta abril podemos estar en el vivero de emprendedores. Es como una familia para nosotros, todavía no vemos el día de salir, no queremos verlo porque empezamos allí y es donde hemos ido madurando. Es un sitio donde estámos encantados y en poco tiempo nos va a tocar cambiar. Ahora nos hemos trasladado a una oficina más grande dentro de Zaragoza Activa porque al aumentar el equipo se nos quedaba pequeño. Ha quedado un estudio muy majo.
-¿Por qué el nombre de i+cono?
-La idea inicial de Imascono tenía el objetivo de apoyar a jóvenes diseñadores. Por lo general tenemos como iconos a aquellas personas que han tenido una larga trayectoria y gran visibilidad y en este caso queríamos darle la vuelta a la tortilla y convertir en iconos a los jóvenes diseñadores. El tema del + era por un asunto de registro de marca, porque icono era una palabra común e iba a ser más complicado, aparte le daba mucho más juego al logotipo. Cuando incorporamos la tecnología hicimos un brainstorming y ahora mismo nuestra marca ha evolucionado hacia Imaginación+Conocimiento. La imaginación hace referencia a la parte creativa y el diseño y el conocimiento a la parte tecnológica.
-A raíz de la moda, habéis adaptado la realidad aumentada a los contextos más innovadores, desde una botella de vino interactiva hasta la promoción del Festival Picnick de Barcelona. ¿Qué próximos proyectos abarcará la marca?
-La verdad es que estamos teniendo muy buena cabida en el marketing. La botella de vino ha funcionado muy bien, hicimos en verano la del mundial de futbol y ahora la de navidad y estamos desarrollando una tercera que se presenta también en febrero. Pero ahora mismo nuestro objetivo es focalizarnos en el desarrollo de Chromville.
-Muchos padres se alegraran de poder contar con una forma original y divertida de entretener a los pequeños.
-Ha sido un proyecto que nos ha permitido solucionar un problema y es que los niños están perdiendo la atención de la educación porque están muy focalizados a los dispositivos digitales. Dedican la mayor parte del tiempo a jugar con ellos y están dejando a un lado la educación. Con Chromville buscamos que los niños aprendan divirtiéndose, convirtiendo así la educación en un videojuego.
-¿Qué beneficios puede aportar su uso a los niños?
-Esa es una de nuestras claves de éxito. Nuestra intención con Chromville es asociar la educación tradicional con la educación digital con el objetivo de que el niño desarrolle al máximo sus capacidades. Aporta muchos beneficios. Desde pintar, que también conlleva el desarrollo físico, la creatividad, la imaginación y la interacción de las tablets, hasta el desarrollo cognitivo y de lenguaje, de percepción y de visión.
-¿Te acuerdas de la primera vez que viste a un niño jugar con Chromville?
-La verdad que me acuerdo del primero y de los últimos porque cada vez que ves a un niño interactuar la respuesta es muy positiva. Gritan y se quedan alucinando. Es muy gratificante porque es una tecnología que genera un impacto muy positivo y al final sacárle una sonrisa a tus clientes y usuarios es lo mejor.
-La aplicación además abrió puertas en EEUU…
Sí, a raíz de un tweet de un profesor se formó una rueda viral que nos permitió hacer visible nuestro proyecto en Estados Unidos. A raíz de ahí hicimos un análisis de aceleradoras a nivel internacional y encontramos Mind the Bridge, una empresa italiana que traslada empresas europeas a Silicon Valley. Seleccionaban 8 proyectos para exponer en Italia y luego uno o ninguno para ir a EEUU. Les convencimos y a la semana nos dijeron que estábamos seleccionados. Gracias a eso recibimos un mes de formación empresarial en San Francisco.
-Sin embargo, el proyecto con mayor difusión de este año ha sido la realización del cartel de la película REC4. ¿Cómo fue la experiencia?
–Una de las cosas que más nos interesa es que nos presten atención empresas externas y en el ámbito del cine veíamos un gran potencial. La verdad que fue un orgullo y un reto que pensaran en nosotros y la experiencia del zombie es lo mejor que hemos hecho hasta ahora porque tenía que llevar ese toque de realismo y el resultado fue brutal.
-¿Dónde está el límite de la realidad aumentada?
-En principio no hay límites. Nosotros disfrutamos mucho porque estamos creando mundos digitales e imaginarios que es lo que nos gusta. Por decirlo de alguna forma somos frikis o gente de la cultura del videojuego, del comic y las nuevas tecnologías. Yo estoy en la parte de creatividad y de gestión de proyectos y no en la parte de desarrollo y los productos que estamos haciendo cada vez me sorprenden más porque tienen una fuerza brutal.
-¿Habéis vendido más con motivo de los regalos de Navidad?
-Si, vendemos principalmente en el sector del regalo. El soporte es una marca de ropa pero lo que realmente vendemos no es la marca de ropa sino la experiencia. El problema que hemos encontrado es que o el punto de venta tiene un display donde muestre la realidad aumentada o si la tiene en una percha más pasa desapercibida y pierde su valor diferencial. Entonces estamos trabajando muy bien con tiendas de regalo porque es algo diferente y original.
-¿Cuál es vuestro próximo reto?
-Nos encantaría trabajar para entrar en alguna aceleradora en Estados Unidos. Las aceleradoras son empresas que seleccionan ideas de negocio en diferentes estados para que desarrolles el proyecto y adquieren un porcentaje del accionariado a cambio de dinero y conocimiento. Estamos buscando Smart Money, que es el dinero inteligente, para que entre un inversor que pueda aportarnos ese músculo financiero que nos falta además de sus conocimientos y experiencia.
-Y finalmente, ¿podrías compartir con nosotros una buena noticia?
– Lo mejor es que hemos crecido este año. Hemos duplicado plantilla y a nivel de facturación hemos triplicado y yo creo que la mejor noticia es que hemos podido seguir creciendo en los tiempos que corren y que las perspectivas son muy buenas para 2015.