Marta Plano. / Ha llevado el nombre de Zaragoza a un Campeonato Mundial de Patinaje Artístico, quedando en el puesto número 12 y haciendo realidad su sueño. Con 28 años Fernando Casanova ha colgado los patines en la modalidad libre (individual), aunque continúa competiendo en show (coreografía grupal) y trabajando como entrenador.
Mañana 7 de febrero se celebrará el Campeonato de Aragón de Show, en el que competirá junto al resto de patinadores del Stadium Casablanca. En esta entrevista el zaragozano nos habla sobre su historia, empezando por cuando siendo tan solo un niño imitaba los entrenamientos de los patinadores y sobre el patinaje artístico.
– ¿Cómo te diste cuenta de que el patinaje era tu deporte?
Tenía nueve años y empecé a patinar solo, viendo a los niños y las niñas que patinaban en el Stadium Casablanca. Me fijaba en las figuras que hacían e imitaba sus movimientos, aunque evidentemente no llevaba patines. Luego encontré unos patines viejos de mi hermano y me los empecé a poner. Pronto les dije a mis padres que me quería apuntar a patinaje artístico y la verdad es que avancé muy rápido, enseguida me saqué todos los test y entonces me di cuenta de que era mi deporte. Previamente había probado muchos deportes pero ninguno me gustaba.
– ¿Podríamos hacer un recorrido por tu extensa carrera?
He patinado siempre en el Stadium Casablanca, desde que tenía nueve años hasta ahora que lo he dejado con 28. He ido a cuatro campeonatos de Europa y este año fui al mundial, también he ido a copas internacionales y de los campeonatos de España he perdido la cuenta, desde 1999 hasta el 2014, excepto un año que hice una pausa.
Como entrenador he pasado por varios clubs, por Pinseque, Mesaches, Épila…. Y ahora estoy en el Alvia y en el Club Patín San juan, y en el Stadium Casablanca como entrenador de show, donde también entreno.
– Este año has quedado segundo en el Campeonato de España, sexto de Europa y número 12 del mundo. Imagino que para ti son unos logros muy satisfactorios.
Sí, el de España sí, pero el mundial no tanto porque son dos pruebas diferentes, el baile corto y el largo, y el corto la verdad es que no me salió todo lo bien que me podría haber salido, y me quedé el 18 de 25. En un mundial salir en el largo habiendo quedado en esta posición en el corto te condiciona mucho para el puesto final. No hice un mal largo pero si hubiera hecho bien el corto podría haber quedado entre los diez primeros.
– Ahora ya no patinas en la modalidad de libre. ¿Cuál era tu meta cuando competías?
Mi meta en el patinaje era llegar a un mundial. Me propuse cumplir ese reto y luego ya dejarlo aunque quedara último. Finalmente quedé de mitad para arriba pero con la satisfacción de haber logrado mi reto.
Tienes que luchar por lo que sueñas, por eso animo a toda la gente que, como yo, que me ha costado 19 años llegar a un mundial y cumplir mi objetivo, piensan que lo importante es continuar. Aunque hay muchas caídas y decepciones lo importante es levantarse y al final, si se trabaja, se recibe su recompensa.
– ¿Ha habido algún motivo en especial por el que has colgado los patines en modalidad libre?
Bueno, uno es que ya me siento un poco mayor porque voy a hacer 29 años y aunque me veo muy bien, soy de los más mayores. Creo que ahora es momento de que patinen los pequeños. Además está subiendo gente muy joven y muy preparada, y habiendo llegado al mundial, correr el riesgo de volver otro año pero quedar por detrás no me convence.
He preferido dejarlo en el momento más alto porque para mí era más satisfactorio hacerlo así que seguir otro año más y no llegar, por ejemplo, a un europeo.
– Donde sí que continúas compitiendo es en la modalidad de show. Vuestra próxima cita es el Campeonato de Aragón mañana día 7 de febrero. ¿Cómo os planteáis este campeonato?
Pues la verdad es que vamos un poco perdidos en cuanto a puntuaciones porque en los últimos años habíamos seguido un mismo estilo de disco que hacía más énfasis en los sentimientos, y este año hemos cambiado un poco de idea, y nos centramos más en el objeto. A todos nos gusta, a mí sobretodo me gusta porque es un cambio de registro y el vestuario y el atrezzo que llevamos es muy original y vistoso. Pero no sabemos si gustará más o gustará menos. Igual si están acostumbrados a nuestro antiguo estilo nos puntúan más bajo, pero bueno.
De cara al de España el año pasado y el anterior quedamos sextos, y este año nos gustaría subir al quinto puesto si puede ser. Además será especial porque este año se celebra en Zaragoza.
– ¿Todavía tienes algún objetivo pendiente en el mundo del patinaje?
Llevar a niños al Campeonato de España, me gustaría que alguno llegara, aunque quedase mal. Sobre todo por la ilusión de sacarlo desde cero, porque no es lo mismo que te llegue alguien ya entrenado que un niño o una niña a la que le enseñas desde el comienzo. Este sería mi objetivo como entrenador.
Y como patinador de show sería llegar a un europeo, pero es muy complicado en grupo porque la competencia catalana es muy alta.
– ¿Se puede vivir del patinaje?
Yo he conseguido vivir de esto como entrenador trabajando todas las tardes de lunes a domingo. Tenía otro trabajo pero como lo que me gustaba era esto decidí apostar por el patinaje en vez de dedicarme a otra cosa. Me hicieron elegir y escogí el patinaje.
– Después de tantos años en el mundo del patinaje, ¿qué evolución has visto en este deporte en Zaragoza?
Pues la verdad es que todavía lo sigo viendo un poco atrás porque entrenamos poco en comparación de lo que entrenan en otras comunidades, aunque poco a poco va saliendo más gente al Campeonato de España. Cuando yo empecé íbamos uno de cada categoría y había muchas categorías que se quedaban desiertas.
Va un poco a temporadas, ahora con la crisis en casi todos los clubs se ha notado un bajón de patinadores. Hay clubs que tenían muchísima gente y ahora se han quedado con menos patinadores.
– Por último, ¿qué buena noticia te ha llamado la atención últimamente?
Pues la verdad es que ahora mismo en patinaje no hay muy buenas noticias, pero en general lo positivo es que poco a poco parece que la crisis va pasando y la gente va encontrando trabajo.