Redacción./ El proyecto que transformará la avenida de Cataluña en un vial moderno, con los servicios renovados y una mayor superficie peatonal se ha dado a conocer hoy a los vecinos en el transcurso de una reunión que se ha desarrollado en la Junta del Distrito del Rabal.
Ingenieros municipales del servicio técnico de Infraestructuras, han detallado este documento, que ha comenzado los trámites para su aprobación, renovará el tramo entre la Z-30 y el ferrocarril y que precisa de una inversión de 3,8 millones de euros en un plazo de ejecución de doce meses.
El proyecto entre la Z-30 y el ferrocarril tiene una anchura media de 51 metros y una superficie de actuación de 28.219 m2, que se reparte prácticamente al 50% entre zonas de calzada y aceras y zonas ajardinadas.
La sección tipo predominante está formada por dos calzadas (una en cada sentido de la circulación) con dos carriles cada una. Los dos sentidos se separarán con una mediana de 2 metros de ancho, donde se colocará la iluminación principal, que se alternará con la plantación de arbustos y coníferas.
Cada una de las calzadas se organizará con los dos carriles de circulación, un aparcamiento en línea con diferentes usos según las zonas, un separador pintado y un carril bici de 1,5 metros de ancho en cada sentido, que totalizará 1.650 m2. El Ayutamiento ha añadido que «la idea es que el aparcamiento en línea y el separador puedan convertirse con el tiempo en otro carril, si el volumen de tráfico lo hiciese necesario».
A ambos lados de la calzada surgen dos bandas de 11,50 metros cada una, formadas por un separador de adoquín de un metro de anchura, una platabanda ajardinada de 6 metros, con césped y árboles, y una acera de 4,5 metros.
Las aceras dispondrán de iluminación independiente de la de la calzada. En total, se instalarán 107 columnas y 146 luminarias. Todo el alumbrado incorpora la tecnología led. Los andadores también irán provistos de 18 bancos y 19 papeleras.
La reforma de la avenida precisará la realización de una nueva red de riego, adaptada a la nueva superficie verde que ocupará el 13,40% del vial y que contrasta con la falta de elementos naturales que hay en la actualidad.
En total se construirán 17 alcorques y se generará un manto de césped de 3.783 m2. También se incorporarán 573 metros lineales de seto, 158 unidades de almez, 77 de Juníperus Scopulorum (enebro) y 153 de Viburnum Lucidum(planta arbustiva). Asimismo se habilitará 407 metros de riego por goteo y 1.736 de conducción para riego por aspersión.
Agua y vertido
La actuación en la avenida de Cataluña incluye la renovación de las redes de agua y vertido. En concreto se implantarán 1.584 metros de conducciones de abastecimiento de fundición dúctil (40 metros de tubería de 150 mm; 1.012 de tubería de 300 mm y 532 metros de tubería de 500mm) y 750 metros de vertido, así como 4 acometidas y 72 sumideros.
La obra incluye también la señalización y semaforización del viario (12 báculos y 27 columnas) y la reposición y entubado de dos acequias del Sindicato de Riegos del Rabal, afectadas por la transformación viaria. También se definen los trabajos necesarios para actualizar las redes de gas, electricidad y telecomunicaciones, según los datos que aportan las propias compañías de servicios.
Con este diseño de la nueva avenida, el espacio destinado a aceras y mediana representa el 32,36% de la avenida; la calzada el 48,38% ; las zonas verdes, antes inexistentes pasa a suponer un 13,40% y el carril bici, ahora testimonial, contará con un 5,86% de la superficie
La intención del área de Urbanismo y del servicio de Infraestructuras al presentar este documento ha sido la de tener disponible el proyecto para poder actuar en la transformación de la avenida de Cataluña en el momento en que pase a ser un vial municipal. Esta primera fase de obras sería la más viable de acometer, en función de la disponibilidad económica del Ayuntamiento, si la cesión se hace efectiva por parte del Ministerio de Fomento.
Aunque las obras completas de renovación afectarán a 1.365 metros, el tramo objeto de cesión es, sin embargo, más amplio, ya que incluye desde la Ronda Hispanidad hasta la rotonda situada en el acceso a Nurel II, incluida la travesía de Santa Isabel, que totalizan 4,3 kilómetros.