Redacción. / La exposición ‘Las bicicletas son para Zaragoza’ se ha complementado con la exhibición de un prototipo de bicicleta plegable, diseñada y construida artesanalmente por Octavio Artigas Artigas y con la que consiguió la Medalla de Oro en el Pabellón Nacional de Invenciones de la XVII Feria Oficial y Nacional de Muestras celebrada en Zaragoza en 1957.
Esta muestra de ingenio, conservada y ahora cedida por la familia de Octavio Artigas, permanecerá expuesta en el Centro Ambiental del Ebro hasta el 31 de mayo, día en que finaliza ‘Las bicicletas son para Zaragoza’.
‘Las bicicletas son para Zaragoza’ analiza el antes y el después de que se generalizara su uso como medio de transporte por la ciudad.
El nivel de contaminación y de ruido y el número de accidentes se ha reducido, en parte, debido al mayor uso de la bicicleta para desplazamientos por la ciudad. Esto ha convertido a Zaragoza en una ciudad amable y saludable en la que los peatones y ciclistas recuperan el espacio que les pertenece.
Como en cualquier fase de crecimiento y cambio, la popularización del uso de la bicicleta ha generado conflictos de convivencia entre los distintos usuarios del espacio público: peatones, ciclistas y automovilistas.
La mejora en las infraestructuras, la definición de normativas, el aprendizaje en convivencia y el civismo ciudadano son los frentes con los que afrontar el desafío de una ciudad mejor en la que la bicicleta se convierte en el mejor aliado, según la exposición.
Una colección de paneles, planos y objetos introducen al visitante en el apasionante mundo de la bicicleta en la ciudad: cómo era Zaragoza antes de las bicis, cómo es y cómo quiere ser; los beneficios de la bicicleta; el desafío de la convivencia entre usuarios del espacio público; experiencias de otras ciudades europeas y del mundo; innovaciones en infraestructuras y en las propias bicicletas, entre otros asuntos.