Redacción:/ Oriente y Occidente. En la Exposición Universal de París en 1878, se fusionan los conocimientos orientales y occidentales, creando un solo arte de Origami. A finales del siglo XIX, Friedrich Fröebel, incorpora y desarrolla el origami en sus técnicas de enseñanza a nivel escolar, siendo adoptado rápidamente en los jardines infantiles japoneses por la utilidad en el preescolar para enseñar las figuras geométricas, entre otros beneficios que brinda el origami en la educación. Por esta época, un vendedor europeo llevó a Tokio papel de colores, desconocido allá, este tuvo una amplia acogida que hizo que el origami mejorara su calidad en la realización de los modelos.
LLega a España. En España quien introdujo realmente y propulsó el Origami, fue el escritor español Miguel de Unamuno alrededor de la década de 1930. Ya que hasta entonces, el origami apenas había tenido influencia en la península, pues pese a haber sido introducido por los árabes, en la Europa Medieval lo que se utilizaba era el papiro, un material bastante ‘tosco’ si lo comparamos con el ligero papel de arroz oriental. Por eso, cobra notoria importancia Miguel de Unamuno pues es el primero que realmente se tomó en serio hacer «pajaritas de papel». Don Miguel ademas de escribir multitud de obras literarias de gran relevancia, escribio una especie de tratado acerca de la ‘cocotología‘; término creado por el propio Unamuno para designar al origami, que deriva de ‘cocotte’ que significa algo así como ‘pajarita’ en francés. Además, Miguel de Unamuno publicó varios libros de plegado, entre ellos el ensayo «Amor y Pedagogía».
Zaragoza y el Origami. Zaragoza es una ciudad donde Papiroflexia se pronuncia con nombre propio desde hace tiempo: la existencia de una tertulia de plegadores está documentada desde de 1944, tomando como sede el Café Levante, lugar donde nacieron la mayoría de ideas que ahora pode,os disfrutar. En 1978, el Grupo Zaragozano de Papiroflexia se renovó viniendo a desarrollar desde entonces múltiples actividades populares, como los festivales de aviones de los años 80 o la entrega del manto de papel a la Virgen del Pilar en 2007. Uno de sus principales afanes del Grupo fue y continúa siendo la organización de encuentros y exposiciones de carácter internacionales. El más importante tuvo lugar en el Centro de Historias de Zaragoza en 2009. A partir de ese momento se hizo evidente que el primer museo europeo de origami sería en Zaragoza.
La Escuela-Museo. La escuela Museo de OIrigami de Zaragoza se encuentra en el piso superior del Centro de Historias.En el numero 2 de la Plaza de San Agustín, el edificio se conforma siguiendo la planta antigua de la iglesia conventual de la que hoy restan cripta y fachada. La fachada barroca y su torre campanario, de principios del siglo XVIII, se ha habilitado como acceso principal al Centro desde la Plaza San Agustín. En su recuperación se ha tenido en cuenta la conservación al máximo de los elementos originales, incluyendo los motivos decorativos y heráldicos de que consta. Por otra parte, también se incorpora el espacio conservado de la cripta de la antigua iglesia, incluido en el sótano 1 del edificio. Así, la nave principal del Centro se articula entre la fachada histórica y la cripta. El Museo organiza sucesivas actividades y cursos para socios y aficionados al arte de la papiroflexia. Cursos,talleres, actividades Para apuntarte a los cursos y talleres que organiza el EMOZ puedes informarte en el propio museo o a través de nuestro correo electrónico o teléfono.
E-mail: emoz@emoz.es
Telefono: 876 03 45 69
La colección. Alojada en la Escuela-Museo ha sido realizada con el tesón de los miembros del grupo gracias a las relaciones establecidas por sus miembros a lo largo de sus más de sesenta años de historia. La amistad con grandes plegadores: Akira Yoshizawa, Yoshihide , Momotani, Eric Joisel, Vicent Floderer y tantos otros ha permitido agrupar en un único lugar el mejor conjunto de obras de origami del mundo. La correspondencia compartida, los encuentros internacionales y las exposiciones realizadas han sido claves para que mediante adquisiciones y donaciones el Grupo Zaragozano de Papiroflexia y sus miembros llenen las salas de la Escuela-Museo con obras de gran calidad.
Y para terminar este reportaje sobre la Papiroflxia, Origami, en definitiva sobre «El Arte en Papel», no podemos olvidarnos de esta bonita historia, merece la pena conocerla.
Leyenda de Sadako Sasaki y las mil grullas de origami.
Sadako Sasaki tenía dos años cuando cayó la bomba en Hiroshima, ciudad en la que vivía. Diez años más tarde (cuando tenía 12 años), como consecuencia de la irradiación que le produjo la bomba de Hiroshima, los médicos le diagnosticaron leucemia. Cuando la pequeña Sadako estaba en el hospital recuperándose de su enfermedad, su amiga Chizucho le explicó la historia de las 1.000 grullas de papel. La historia consiste en que si deseas algo con mucha fuerza y construyes 1.000 grullas de papel ( papiroflexia), los dioses te concederán ese deseo que tanto anhelas. Es así como Sadako deseó curarse de su terrible enfermedad y para ello se propuso construir por sí misma 1.000 grullas de papel, aunque no logró conseguirlo porque falleció mucho antes de poder acabarlas todas. Murió en octubre de 1955 y sólo había conseguido plegar 644 grullas de papel. Simbólicamente, sus amigos continuaron su misión y completaron las mil grullas, con la esperanza de que se evitaran las guerras en el futuro y se consiguiera la paz entre todos los países del mundo. Tres años más tarde de la muerte de Sadako, los niños de toda la ciudad de Hiroshima le dedicaron una estatua de ella con una grulla en su mano. La estatua está en el Parque de la Paz de Hiroshima. Cada año, para el 6 de agosto, día de la Paz, llegan miles de grullas de papel a Hiroshima desde todos los lugares del planeta. Los niños de la ciudad cuelgan las grullas en el monumento de Sadako, con la esperanza de transmitir este mensaje a todo el mundo.