Beatriz Sastron./ El otro día me encontré con un antiguo compañero de trabajo que se había comprado un chiguaga, al margen de mi forma de pensar con respecto a la adopción frente a la compra que le hice saber, me sorprendió que me dijera que se había decidido por esta raza porque abulta poco y hay que sacarlo menos, en ese mismo momento decidí escribir este artículo.
Un perro no tiene necesidades diferentes en función de su tamaño, necesita el mismo cariño, amor, cuidados y atenciones. Hay perros pequeños que son muy activos y necesitan mucho ejercicio, igual que hay grandullones que son más tranquilos y necesitan un ejercicio más moderado, esto va en función de cada perro no de lo que abulte. Hay perros pequeños que son tan activos que un piso de 300m2 se les queda pequeño y perros de 30 kilos que encuentran su hogar en un apartamento.
De hecho los Grandullones son la mejor ayuda en casa cuando tenemos niños pequeños, se pueden agarrar a ellos cuando dan sus primeros pasos o intentan levantarse, y un perro grande soporta mejor las travesuras de los pequeños de la casa, participando de ellas como uno más, son la mejor almohada para los peques de la familia.
Antes de adoptar responsablemente a un animal debemos valorar el tiempo que tenemos para dedicarle, de los cuidados que requiere, del espacio que tenemos, de la aprobación del resto de los miembros de la casa, de si tenemos otro animal…
Una vez que nos hayamos decidido os recomiendo que habléis con los responsables de las Protectoras que son los que mejor conocen cada uno de los animales que allí están, dejaros aconsejar por ellos, que os presentes a sus grandullones, conocerlos a todos y dejar que cualquiera de ellos os robe el corazón.
Yo os animo a que conozcáis a Xabi, Noa, Luna, Unkas, Cronos, Harry, Monty, Bosco, Goku, Ciro, nuestros
grandullones maravillosos, podéis conocerlos a través de nuestra página web y si estáis decididos enviarnos un correo a voluntarios@zarpa.org o a acogidas@zarpa.org para subir a conocerlos y que os los presenten para pasearlos, cepillarlos, ser su casa de acogida o adoptarlos.
Nos lo dudéis ni un momento pon un grandullón en tu vida y te llenará de kilos y kilos de amor
Hoy el protagonismo es para los grandullones