ZBN./ Las empresas se mueven entre un moderado optimismo y incertidumbre en sus perspectivas económicas, según el primer Indicador de Confianza Empresarial (ICE) de Aragón para 2016 .
El índice, elaborado por la Fundación Basilio Paraíso de la Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Zaragoza con la colaboración de Ibercaja, recoge la situación con que las empresas aragonesas cerraron el último trimestre de 2015 y las expectativas para el primero de 2016.
Mientras el final del ejercicio anterior refleja la recuperación de la confianza empresarial, el periodo entre enero y marzo puede estar influido por las incógnitas en la formación de Gobierno tras las elecciones generales del 20-D. El ICE actualiza cada trimestre el análisis más detallado que existe sobre la opinión empresarial de Aragón, con una serie histórica de más de una década. El dato oscila entre +100 y -100; los valores positivos señalan avances en la actividad y los negativos, retrocesos.
Diferencias
El ICE logra un ligero aumento, hasta 6,5, si bien existen claras diferencias entre la confianza al final de 2015 (un índice de 13, el mejor de la última década) y al inicio de 2016 (queda en 0). La incertidumbre domina la opinión de los empresarios sobre las perspectivas económicas para el año actual.
De cualquier forma, la recuperación de la confianza en trimestres anteriores permite alcanzar un dato conjunto (situación + expectativas) que consolida el final de las impresiones negativas. El sector terciario presenta un optimismo más acentuado que la industria y la construcción.
La inversión se convierte en el indicador del ICE que logra un mejor comportamiento, por encima del empleo y de las ventas. Casi un 25% de las empresas de Aragón ha incrementado la inversión, un porcentaje similar al de quienes han recortado la facturación.
El empleo presenta unos resultados muy estables, con más del 65% en los mismos niveles que en trimestres anterior. Sólo el 5,7% habla de disminuciones. Las expectativas para el primer trimestre recogen la incertidumbre en sus indicadores: las compañías que invierten se reducen a la mitad (11,3%) y las empresas que esperan aumentar el volumen de facturación caen del 34,6% al 22%. El empleo se mantiene en más del 70% de los casos.
Respecto a los factores que limitan el nivel de actividad de las empresas de la comunidad, la debilidad de la demanda sigue siendo el principal: el 80,5% del tejido productivo la nota, según el informe de la fundación cameral e Ibercaja. Siguen el aumento de la competencia (37,1%) y las dificultades de financiación o tesorería (19,5%). Todos los factores se mantienen estables respecto al periodo anterior.