Redacción. Menor sangrado, menor dolor postoperatorio, reducción de la estancia hospitalaria y una recuperación mucho más precoz. La endoscopia de columna supone una revolución en el tratamiento de hernia discal y estenosis de canal a través de una incisión de tan solo 8 milímetros. Además, permite su realización en muchos casos bajo anestesia local, evitando los efectos secundarios de la anestesia general, y haciendo accesible la cirugía de columna a paciente añosos o con riesgo elevado anestésico por enfermedades asociadas.
El doctor Daniel Iglesias, traumatólogo de Quirónsalud Zaragoza y el único especialista en Aragón que realiza esa intervención, explica que “la cirugía consiste en la introducción a través de una pequeña incisión del endoscopio que está provisto de una cámara de alta definición, cuya imagen aparece en un monitor de televisión, que muestra al detalle las estructuras nerviosas, la hernia, etc. y permite, a su vez, introducir los diferentes instrumentos necesarios para solucionar las diversas causas de compresión nerviosa, siempre con la mejor calidad de visión”.
“A su vez, durante toda la cirugía, se establece una entrada y salida continua de suero que facilita una disección menos agresiva, favorece la eliminación del proceso inflamatorio asociado y disminuye el riesgo de infección. La cirugía se realiza con el máximo control de seguridad tanto por la excelente visualización de las estructuras como por el control continuo con un aparato de rayos”, añade el doctor Iglesias.
Ventajas
Gracias a esta técnica se evitan las grandes incisiones habituales, lo que se traduce en una notable reducción del dolor postoperatorio, del sangrado y del riesgo de infección. Además, se reduce la estancia hospitalaria y la recuperación funcional del paciente es más rápida.
Otra de las ventajas de esta técnica frente a la cirugía convencional es que, dada su mínima agresividad sobre los tejidos, no desestabiliza la columna evitando así lumbalgias posteriores o la necesidad de implantar tornillos en un futuro. Asimismo, evita la formación de adherencias o fibrosis de los nervios y, por tanto, dolores irradiados futuros.
Respecto al período de rehabilitación, éste se inicia de forma inmediata sin tener que guardar reposo absoluto desde el principio, evitando una convalecencia dependiente de otras personas, recuperando su vida personal precozmente y agilizando notablemente el período de baja laboral, así como la reincorporación a una práctica deportiva.
Células madre
Por otra parte, tal y como explica el doctor Javier Domingo, jefe del servicio de Traumatología y Cirugía Ortopédica, “esta técnica suele completarse con la aplicación de células madre o factores de crecimiento por los beneficios que supone”.
“En esta cirugía endoscópica se sitúa en el interior del disco, bajo visión directa para poder realizar el implante, mejorando aún más ese óptimo resultado que se busca por sus efectos regeneradores, cicatrizantes, antiinflamatorios y de mejora de la circulación local que ofrecen estos complementos biológicos”, añade Domingo.