Redacción. Un total 108.586 alumnos de Infantil y Primaria comenzarán el próximo mes un curso que se iniciará de manera escalonada a partir del día 7, reduciendo las ratios de los centros –ya de por sí, de las más bajas del país– y en jornada de mañana para tratar de evitar desplazamientos y minimizar los riesgos. Así lo ha confirmado hoy el consejero de Educación, Cultura y Deporte, Felipe Faci, en una comparecencia en la que ha estado acompañado por la secretaria general técnica, Estela Ferrer, y la directora general de Planificación y Equidad, Ana Montagud.
Con el fin de dar respuesta a las necesidades que plantea la situación generada por la COVID-19, y ante el inicio del próximo curso escolar, el Departamento de Educación ha presentado hoy los diferentes planes específicos de prevención, protección y organización que se implantarán en los centros educativos de la Comunidad Autónoma, que vienen a complementar a los planes de contingencia, de refuerzo pedagógico y de digitalización presentados a finales de junio y cuyo objetivo es minimizar, en la medida de lo posible, las consecuencias de un posible rebrote en alguna de las instalaciones.
Una organización que ha sido fruto de un intenso trabajo desarrollado durante todo el verano en permanente colaboración y diálogo con el Departamento de Sanidad y con todos los sectores de la comunidad educativa, con los que ha habido reuniones periódicas en las que también ha participado el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán. Por este motivo, el consejero Felipe Faci, ha querido trasladar un mensaje de confianza ante el inicio de un curso que, ha reconocido, será “complicado”, pero que “conciliará la seguridad y el derecho a la educación”.
Lugares seguros
Faci ha recordado que durante el estado de alarma se dio una “respuesta ejemplar” por parte de la comunidad educativa y ahora se volverá a garantizar la educación. “Los centros educativos son de los lugares más seguros que puede haber, a la altura del hogar familiar –ha declarado-, gracias a la implicación de toda la comunidad educativa”.
Aunque se seguirá primando la presencialidad, la evolución de la COVID-19 en Aragón durante el verano ha hecho necesario replantear el inicio de curso y aplicar el segundo escenario, que combina la escolarización presencial y semipresencial en los últimos cursos. Así, el curso se iniciará con la presencia total del alumnado desde 2 años hasta 2º curso de ESO, con el establecimiento de grupos estables de convivencia (GEC) y favoreciendo la reducción de ratios. El resto de niveles, de 3º de ESO a 2º de Bachillerato, alternarán enseñanza presencial y a distancia. Esto, unido al fomento de desdobles, permitirá una ratio máxima de 22 alumnos y, en el resto de cursos, una presencia de un máximo de 15 alumnos en clase debido a la alternancia.
Además, habrá alrededor de 400 nuevos profesores en las aulas aragonesas, tras el estudio realizado con los centros educativos acerca de sus necesidades para el próximo curso. Estos docentes se suman al incremento de 300 docentes el pasado curso y a los 1.500 que se incorporaron en la pasada legislatura. Esta medida se complementa con un plan que permitirá un sistema de sustituciones más ágil de cara a asegurar la continuidad de la actividad educativa en cualquier circunstancia.