Redacción. «Sensibilizar a la sociedad aragonesa de la importancia que tiene el comercio en la transmisión de valores”. Este es, según la directora general de Cooperación al Desarrollo e Inmigración, Natalia Salvo, el principal objetivo de la campaña “Regala solidaridad” que ha puesto en marcha el Gobierno de Aragón de cara a las compras navideñas.
Junto al comercio justo, la campaña anima a regalar productos que garanticen el equilibrio medioambiental, la igualdad entre mujeres y hombres, el trabajo decente y la preservación de la salud y el bienestar social.
La campaña forma parte de las iniciativas llevadas a cabo por la citada dirección general sobre el comercio justo, una línea prioritaria de actuación del Servicio de Cooperación al Desarrollo. Asimismo, se alinea, de acuerdo al trabajo impulsado en la materia por el Gobierno de Aragón, con la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas. Concretamente, responde a los ODS 5 (igualdad de género), ODS 8 (trabajo decente y crecimiento económico), ODS 10 (reducción de las desigualdades), ODS 11 (ciudades y comunidades sostenibles), ODS 12 (producción y consumo sostenible) y ODS 13 (acción por el clima).
¿Qué es el comercio justo?
En términos de la Coordinadora Estatal de Comercio Justo, éste es un sistema comercial que persigue el desarrollo de los pueblos y la lucha contra la pobreza, y que se basa, fundamentalmente, en condiciones laborales y salarios adecuados, igualdad de oportunidades y prácticas respetuosas con el medio ambiente y el sistema en el que se producen.
Asimismo, la definición que da la Organización Mundial del Comercio Justo WFTO es: “El Comercio Justo es un sistema comercial basado en el diálogo, la transparencia y el respeto, que busca una mayor equidad en el comercio internacional prestando especial atención a criterios sociales y medioambientales. Contribuye al desarrollo sostenible ofreciendo mejores condiciones comerciales y asegurando los derechos de productores/as y trabajadores/as”
“El objetivo, por tanto -dice Natalia Salvo- es sensibilizar a la sociedad aragonesa de la importancia que tiene el comercio en la transmisión de valores, y por ello desde la Dirección General de Cooperación para el Desarrollo promovemos un comercio justo y solidario, que respete las condiciones laborales, la cercanía y el entorno, la igualdad de oportunidades y el equilibrio medioambiental y desarrollo sostenible de nuestro territorio”.
La campaña se va a difundir en plataformas digitales y, además, se enviará a entidades locales y Cámaras de Comercio para que puedan darle difusión desde sus plataformas, de acuerdo, también, con el ODS 17, que promueve las alianzas para lograr los objetivos entre las instituciones, los agentes sociales y la sociedad civil.
Iniciativas
En la Comunidad hay nueve localidades donde el Gobierno de Aragón gestiona edificios que ofrecen productos de Comercio Justo a través de puntos de venta, cafeterías o máquinas de ‘vending’: Zaragoza, Huesca, Teruel, Alcañiz, Barbastro, Monzón, Fraga, Jaca y Sariñena.
Asimismo, en cincuenta y tres edificios del Gobierno de Aragón se puede acceder a productos de Comercio Justo: Hospitales, Centros de Salud, Oficinas de Hacienda o en el Centro de Producción Principal de la Corporación Aragonesa de Radio y Televisión, entre otros.
Nueve pliegos de licitaciones públicas de Departamentos, Organismos Autónomos y Entidades de Derecho Público dependientes de la Comunidad Autónoma de Aragón, incluyen cláusulas de Comercio Justo.
Además, en 2020 se fortaleció la colaboración, también, en el marco del convenio entre el Gobierno de Aragón y la Federación Aragonesa de Solidaridad. Entre otras acciones, se elaboró un tríptico informativo que se distribuyó, en colaboración con la FAMCP, a todas las administraciones locales aragonesas informándoles sobre esta forma de comercio alineado con la Agenda 2030 de Naciones Unidas, así como algunas recomendaciones sobre cómo enfocar la contratación pública en base a estos criterios de solidaridad y justicia social.
Finalmente, en 2021, también en el marco del convenio suscrito con la FAS, se ha reforzado la línea de actuación con las entidades locales, realizando acciones formativas en el territorio con ellas, a fin de lograr una coherencia de políticas públicas enfocadas al desarrollo sostenible, en las que el comercio justo tiene un papel esencial.