Redacción. La Consejería de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón, tras el dictamen del Consejo de Protección de la Naturaleza ha aprobado la Declaración de la “Carrasca del Plano del Águila” de Caspe como Árbol Singular de Aragón, en base a sus características, tal y como ha sido publicado en el BOA del pasado lunes 19 de julio, lo que conlleva su inclusión en el catálogo de Árboles Singulares de Aragón.
La figura de árbol singular se creó para dar a conocer a la opinión pública la existencia de un valioso patrimonio natural que, con frecuencia, pasa desapercibido y favorecer su conservación.
Los árboles que reciben esta denominación se consideran excepcionales por motivos tan variados como su gran tamaño, su belleza, su longevidad, la originalidad de sus formas, su vinculación a un paisaje o su importancia cultural, histórica, científica o educativa, lo que les hace merecedores de definición.
La “Carrasca del Plano del Águila”, cuyo nombre científico es Quercus ilex L, es de carácter autóctono tiene una altura total de 12,5 m. y una envergadura de copa de 12,1 metros y su singularidad se basa en su gran porte y tamaño y su valor cultural. Podemos encontrarla en el paraje conocido como Plano del Águila por el camino del mismo nombre, a unos 1.600 metros de la localidad y está situada en una parcela de titularidad privada.
Los árboles singulares, llamados también monumentales, se convierten por esta denominación en árboles protegidos dentro de su entorno y son un potencial recurso turístico y educacional como generadores de paisaje, testigos del cambio climático y dinamizadores de economías rurales.
La “Carrasca del Plano del Águila” ya era una pieza de museo natural muy conocida en la localidad que ahora podemos incluir de manera oficial en el patrimonio natural y monumental de Caspe.