Nerea Beatove./ El cantante y guitarrista Carlos Goñi, líder del mítico grupo rockero ‘Revólver’, vuelve a Zaragoza para presentar su nuevo álbum: ‘Babilonia’. Un disco mucho más crítico, descarado, sincero y con un sonido totalmente diferente a sus anteriores trabajos.
Tras más de ochenta conciertos con la gira ‘Enjoy’ y nueve discos, Goñi se atreve con algo con lo que siempre había soñado, grabar un disco escrito para ser tocado por tres personas. Acompañado por el bajista Manuel Bagües , y el batería Julián Nemesio, Carlos baja de ‘Entre las nubes’, título de su primer sencillo, para contagiarnos de su música más optimista en la que nos recuerda que en la vida siempre se puede volver a empezar.
Entrevistamos al cantautor Carlos Goñi, que estará el próximo 28 de marzo en el Teatro de las Esquinas, para conocer algunos de los detalles más íntimos de su último disco, así como los temas que a día de hoy siguen emocionándole como el primer día.
-Carlos acabas de estrenar ‘Babilonia’, un álbum con un sonido muy especial y que tiene un trasfondo también muy personal, ¿cuándo y cómo surge este álbum?
-Todos los discos tienen un trasfondo personal porque si no sería incapaz de hacerlos, lo que pasa que mi vida en este último año y pico ha sido un poco más convulsa de lo normal y eso hace que todavía nazca más de las entrañas. Y a parte en este país ha habido unos años bastante convulsos y eso que hace que las letras tengan un tinte un poco más social de lo normal. Hace un año y medio fue cuando empecé a trabajar en la maqueta, escribí el álbum durante la gira de ‘Enjoy’ entre concierto y concierto, llegué a manejar hasta 300 apuntes de canción que al final convertí en 26 temas, para después maquetar 20 y grabar solamente 10, esa fue la secuencia de todo.
-¿Cómo definirías ‘Babilonia’? ¿Qué querías transmitir con él?
-Babilonia decían que era la puta de Oriente, una ciudad a donde cualquiera que pudiera llegar se la encontraba con las piernas abiertas, era capaz de conseguir sus riquezas sin demasiado esfuerzo, aplastar a la población privándola de cualquier tipo de derecho con unas leyes de lo más dictatoriales y extremistas posibles hasta que la ciudad quedaba muerta y llegaba otro y hacía exactamente lo mismo. Hubo un día que estaba viendo el telediario y estaban hablando de las noticias de nuestro querido país y pensé, esto cada vez se parece más a Babilonia y ahí surge todo el álbum.
-En este disco has apostado por algo arriesgado, grabar un disco compuesto solo por tres personas, ¿por qué decidiste hacerlo con tan pocos instrumentos?
-Grabar a trío es una de las ilusiones de mi vida desde hace muchísimos años, siempre he creído que el formato de trio en rock es el formato más difícil de conseguir, y por eso mismo cuando lo consigues no hay nada que se le parezca, todo suena muchísimo más grande y te aplasta mucho más. Hay idea en común y es que tienen que comulgar los tres elementos del susodicho trío porque no admite escapatoria. Tu puedes tener un mal día en una banda de seis pero en una banda de tres no, porque si no, no hay concierto. Además es lo más parecido a tocar solo que es lo que más me gusta en el mundo yo creo y reunía una serie de requisitos que hacían que esto fuese para mí un sueño. Si que es cierto que no solo es necesario tocar bien, sino que hay que tener un punto de comunión absoluto y de trabajar por y para la canción.
-¿Ha sido fácil trabajar con Manuel Bagües y Julián Nemesio para afrontar este reto?
-Sí porque ya veníamos de hacer ochenta y tantos conciertos con la gira de ‘Enjoy’. La diferencia que tiene ‘Babilonia’ con otros álbumes es que cuando de repente decido tocar canciones en ‘Enjoy’ a trío, todo el mundo se echa las manos a la cabeza porque se trataba de hacer canciones que habían sido escritas y tocadas durante muchísimos años por bandas de 5, 6 o 7 personas. Y una vez que lo conseguimos y con nota dije, entonces el próximo álbum lo escribo para ser tocado solo por tres, evidentemente cuando hace eso todo toma muchísimo más sentido, es maravilloso.
-Además, decidiste dejar a un lado Los Angeles y Nueva York para grabar el disco en tu propio estudio, ¿qué te llevó a producirlo de esta forma?
-El asunto de que quería trabajar con un montón de guitarras, un montón de amplificadores distintos, una serie de cosas y en Los Ángeles no tenía las mías, tengo otras. Y creía que el resultado final del álbum sería mucho mejor aquí. Aparte nos quedaban conciertos por hacer y se complicó mucho.
-¿Hay alguna guitarra a la que guardes un especial cariño?
-Probablemente a la que más especial para mí es la que menos valor económico tiene de todas, que es una guitarra Takamine acústica con la que habré hecho fácilmente unos 700 conciertos o así. Es una guitarra que suena extraordinariamente bien pero tiene tantas heridas de guerra la pobrecita mía que al final he decidido dejarla en casa porque no me apetece que se parta en dos de la cantidad de lluvia que se ha comido. Siempre ha dado la cara y jamás ha hecho un solo ruido en los 23 años que lleva conmigo. No es una guitarra nada común porque es una especie de prueba prototipo que hicieron y que a España llegaron 25 nada más, me acuerdo que fui a comprarme una funda y ni si quiera existía.
-¿De dónde surge la inspiración para componer estas últimas canciones, son autobiográficas?
-Siempre lo son, hasta en la más fiel de las autobiografías hay algo de ciencia ficción y hasta en la más imaginaria o fantasiosa historias hay algo autobiográfico.
-La canción ‘Entre las nubes’, deja ver tu lado más optimista, ¿qué querías transmitir con ella? ¿Es esto el reflejo de tu actitud ante la vida?
-Exactamente. En general creo que todo el álbum es así, es como, bueno, nos va a tocar respirar bajo el agua, bueno, pues no hay problema, vamos a aprender. Quería transmitir que siempre se puede volver a empezar. Lo cierto es que disfruto muchísimo de mi trabajo y por fin puedo ser músico 24 horas al día que es lo que me fascina y lo que da sentido a mi vida.
-Después de una larga trayectoria musical ¿cómo valoras la evolución de ‘Revólver’ desde el primer hasta este último disco?
-Pues la misma que yo como persona imagino que tendré mis altibajos, habrá momentos en los que será más agradable estar conmigo y habrá momentos en los que no. Habrá momentos en los que habré actuado con mayor diligencia y otros con mayor torpeza. Hay una cosa de la que estoy muy afortunado y es que se ha permitido que mi música crezca a la par que yo sin tener que estar sujeto a ninguna premisa y eso me ha hecho muy feliz y creo que es un beneficio para la música porque es más real.
-Estarás en el Teatro de las Esquinas el próximo 28 de marzo, ¿recuperaras en esta ocasión algunos de tus temas más míticos?
-Claro, el concierto dura dos horas y pico largas lo que significa que si de Babilonia tocamos 5 o 6 temas, pues fíjate lo que hay que tocar de todo lo demás.
-Si tuvieras que quedarte con solo uno de ellos, ¿cuál sería ese tema con que se te siguen poniendo los pelos de punta?
-Eso me ocurre con muchas canciones, no me quedaría con una pero tampoco reniego de ninguna. Hay canciones que son más especiales, pero va a días, a momentos o años. ‘Dentro de ti’ había momentos en los que cuando la cantaba en Valencia tenía que darme la vuelta porque me ponía a llorar, ahora igual la canción que este año más me coge la garganta es ‘Te amo temor’. ‘Donde está el final’ hubo algunos conciertos en los que me costó mucho trabajo y he decidido no volver a cantarla nunca más, ‘Calle mayor’ es una historia con la que me moría de pena porque la viví en primera persona. Cada canción tiene un por qué y en algún momento u otro me ha hecho que me resultase dificultoso poderla cantar.
-¿Qué les dirías a los zaragozanos par que fueran a verte al concierto?
-Me vendo fatal, me vendo bien encima del escenario. Les diría que para mí siempre es un honor estar en Zaragoza que soy mitad aragonés y que tocar aquí es como tocar en mi casa. Ya desde niño cuando pasaba por la puerta del Teatro Principal ya me quedaba diciendo que ilusión me haría tocar aquí, quién me iba a decir a mí que años después tocaría en muchas otras salas y que iba a disfrutar tanto.
–Y por último, ¿cuál sería tu buena noticia?
-Pues que el inicio de la gira está siendo preciosa y que la vida me sigue permitiendo disfrutar de la música cada día.