Redacción. El obispo de Tarazona, Mons. Eusebio Hernández Sola, el vicario general de la Diócesis de Tarazona, Javier Bernal, y el administrador diocesano, Luis Jesús Rada, se han reunido con el alcalde de Tarazona, Luis José Arrechea, y los portavoces de los grupos políticos del Ayuntamiento para acordar los términos del convenio de colaboración entre el Obispado de Tarazona y el Ayuntamiento de la ciudad para acoger a refugiados ucranianos.
Ambas instituciones consideran que es preciso adoptar medidas de carácter urgente ante el gran número de refugiados y desplazados que están saliendo de Ucrania intentando huir de la guerra. Por ello, han acordado suscribir un convenio de colaboración que permita tomar las medidas necesarias para ayudar a todas estas personas.
Según este acuerdo, el Obispado de Tarazona se compromete a poner a disposición de familias o personas desplazadas o refugiadas como consecuencia de la guerra de Ucrania las instalaciones del Seminario diocesano y también las del Colegio diocesano de la Sagrada Familia. Esto permitirá que estas personas, en su mayoría mujeres, ancianos y niños dispongan de alojamiento, servicio de comedor y, si fuera necesario, escolarización.
El Ayuntamiento, por su parte, va a conceder una subvención al Obispado destinada a sufragar gastos de artículos de primera necesidad como alimentos, higiene o consumo de energía. El consistorio será el encargado de coordinar las actuaciones con el Gobierno de Aragón y con las organizaciones no gubernamentales a través de los Servicios Sociales, que serán los que supervisen el desarrollo del programa de colaboración.